José Arnau, el hombre de confianza de Amancio Ortega, apuesta a lo grande por las naves logísticas
El empresario leonés, fundador y principal accionista de Inditex Amancio Ortega (87 años) sigue apostando por lo que menos se devalúa: el ladrillo. Así se puede comprobar en el hecho de que ha invertido unos 1.430 millones de euros al tipo de cambio actual durante el año 2023.
Lo ha hecho a través de su vehículo inversor, Pontegadea, donde desde hace unos años se ha apostado por una estrategia de diversificación que está dando frutos. Todo ello bajo las riendas del licenciado en Derecho e Inspector de Hacienda lucense José Arnau (67 años), el hombre de confianza de Amancio Ortega y de su esposa, Flora Pérez. De hecho, Arnau es vicepresidente ejecutivo de Pontegadea, vicepresidente segundo de la Fundación Amancio Ortega y vicepresidente de Inditex (donde entró en 1993).
En el año que recientemente ha concluido, Pontegadea ha realizado un total de diez operaciones de inversión: seis en activos de logística, dos en residencial, una en oficinas, otra en hoteles (entrando en este tipo de activos por primera vez) y otra en el sector de las energías renovables. La última operación se ha conocido recientemente, aunque se cerró en los últimos días de 2023: se trata de la compra de un centro logístico en Países Bajos que le ha vendido Blackstone por unos 100 millones de euros y donde Pontegadea será casero de Primark. No será la primera vez que Ortega tendrá a la textil low cost irlandesa como inquilina, pues así sucede con la ‘megatienda’ situada en el número 32 de la Gran Vía madrileña, un edificio donde también es 'casero' de otros rivales textiles (la cadena sueca H&M y la española Mango).
Volvamos a las inversiones de 2023. Es cierto que ha habido más operaciones en ladrillo, en especial en logística, la actual gran apuesta de Arnau, pero la de mayor importe ha sido la realizada en energía: ha ascendido a 363 millones. En concreto, se trató de la compra del 49% de proyecto Ebro, una cartera de 618 megavatios renovables (repartidos entre doce parques eólicos y dos plantas fotovoltaicas) de Repsol y que incluye proyectos con potencial hibridación que añadirían 279,2 MW. Esta operación es la tercera que realiza con Repsol, mientras que aún no ha hecho ninguna con Iberdrola.
No es ningún secreto que a Ortega le gusta el sector de la energía desde hace años, pero al quedarse con la espinita de no poder hacerse con Unión Fenosa en 2005, ha estado un tiempo prefiriendo invertir en Inditex y en inmuebles, convirtiendo Pontegadea en la gran inmobiliaria española. De hecho, actualmente no sólo cuenta con parte de tres proyectos renovables de Repsol, sino que también ha invertido en redes energéticas (entre ellas, la eléctrica, donde urge invertir porque está al límite): posee el 5% de Enagás, compañía transportista de gas y gestora del sistema gasista español donde el Estado controla el 5%; el 5% de su filial verde (Enagás Renovables); y el 5% de Redeia, la empresa transportista de electricidad y operadora del sistema eléctrico español en la que el Estado posee el 20%; y el 12% de REN, el operador de redes eléctricas portuguesas. Además, Ortega también apuesta por Telxius, donde entró en 2018 con un 9,9%, al unirse a Telefónica para comprar al fondo KKR el 40% que tenía de esta filial de infraestructuras de telecomunicaciones: ahora posee el 30% y la teleco que preside José María Álvarez-Pallete y donde van a entrar los saudíes de STC y el Estado español controla el 70%.
No hay que olvidar que las inversiones de Pontegadea son posibles porque tiene dinero para ello, principalmente, por el generoso dividendo que recibe de Inditex (donde las cosas van muy bien con Marta Ortega Pérez como presidenta no ejecutiva y con Óscar García Maceiras como CEO): el cual ha ascendido a 2.217 millones en 2023 y que ha cobrado en dos entregas de 1.108,5 millones (una el pasado 2 de mayo y otra el 2 de noviembre). Y si es cierto que destaca la apuesta por la logística y el alto importe pagado en crecer en energía, por países no hay grandes diferencias: tres operaciones se realizaron en EEUU, dos en Irlanda, dos en Países Bajos, dos en España y una en Reino Unido. Teniendo en cuenta que las inversiones totales de Pontegadea en 2023 ascendieron a unos 1.430 millones y que recibió 2.217 millones en dividendos del líder mundial del textil, aún tiene mucho margen para seguir invirtiendo y para continuar realizando importantes donaciones a la sanidad pública española a través de la Fundación Amancio Ortega.