El aumento del pago con tarjeta no ha mejorado los resultados de la empresa de tarjetas de crédito y soluciones de pago American Express, que cerró su primer trimestre de 2023 con una caída en el beneficio del 13,6% respecto del resultado anotado en el mismo periodo del año anterior, alcanzando los 1.788 millones de dólares (1.631 millones de euros), según ha informado la compañía.

Una de las claves del ejercicio fue el crecimiento del 14% del volumen de gasto procesado en su red, hasta 398.900 millones de dólares (364.014 millones de euros), impulsando los ingresos netos a un nuevo récord trimestral de 14.281 millones de dólares (13.032 millones de euros), un 21,7% más. Por su parte, los ingresos por intereses fueron de 2.983 millones de dólares (2.722 millones de euros), un 35,6% superiores a los de 2022, los ingresos por comisiones y otros conceptos al margen de intereses también crecieron, un 18,5%, hasta situarse en los 11.298 millones de dólares (10.310 millones de euros). 

No obstante, la compañía se muestra cauta y elevó sus provisiones de impago de crédito a 1.055 millones de dólares (963 millones de euros), cuando un año antes redujo esta partida en 33 millones de dólares (30 millones de euros). Desde American Express explican que este aumento de las provisiones consolidadas refleja mayores cancelaciones netas y una creación de reservas netas de 320 millones de dólares (292 millones de euros), mientras que en el ejercicio anterior las provisiones se beneficiaron significativamente de la liberación de reservas.

American Express ha tenido unos resultados entre enero y marzo que "reflejan un fuerte crecimiento en el gasto con tarjeta y un alto compromiso continuo con nuestros productos premium", en palabras de su presidente y CEO, Stephen Squeri, que destacó el desempeño crediticio de los clientes de AmEx, en un contexto de menor crecimiento macroeconómico, inflación elevada y tasas de interés más altas.