La Tagliatella, una de las 'sabrosas' marcas de AmRest
La cadena de restauración AmRest ganó 30 millones de euros hasta septiembre, frente a las pérdidas de 159,8 millones de euros del mismo periodo del año anterior, que estuvo marcado por el impacto del coronavirus, según ha informado la compañía.
Las ventas alcanzaron los 1.378 millones de euros, un 22,4% más respecto a los 1.125,4 millones de euros registrados en el mismo periodo del ejercicio precedente.
Las ventas consolidadas fueron de 533,6 millones de euros durante el tercer trimestre de 2021, con un crecimiento interanual del 21%.
En cuanto al resultado bruto de explotación (Ebitda) este supuso 261, millones de euros, un 68% más frente a los 154,8 millones de euros del mismo periodo del ejercicio anterior.
Respecto a los mercados en los que está presente, todos han continuado con la tendencia al alza. Europa Central y del Este han registrado la mayor mejora, con unas ventas que alcanzaron los 622,5millones de euros en los nueve meses, lo que supone un 45% más que en el anterior.
En la división de Europa Occidental, los ingresos ascendieron a 519,9 millones de euros, un 37,7% más, donde las ventas en España se elevaron un 11,7%, hasta alcanzar los 160,9 millones de euros, mientras que en China se situaron en los 75,2 millones de euros.
La deuda neta de la compañía se sitúa en 490,8 millones de euros a finales del tercer trimestre de 2021, con una posición de caja de 172,6 millones de euros. De esta manera, AmRest ha acelerado el ritmo de desapalancamiento, al reducir la deuda neta un 17% durante el último año.
El director financiero de AmRest Holdings SE, Eduardo Zamarripa, ha explicado: "Las cifras alcanzadas corroboran el éxito del modelo de negocio de AmRest, basado en la innovación continua y, sobre todo, en la excelencia del servicio. Seguiremos centrándonos en el desarrollo de nuestro negocio, equilibrando aún más los restaurantes propios con una creciente red de franquicias".
El grupo AmRest (cuenta con marcas como La Tagliatella, KFC o Bacoa) está controlado por el magnate mexicano Carlos Fernández (dueño del 67,047% y fundador de la sociedad inversora Finaccess).