Antolin continúa con la mejora de resultado y está a las puertas de volver a beneficio, pese al descenso en ingresos
Antolin ha tenido una buena mitad del año, en términos generales, continuando con la evolución mostrada entre enero y marzo. Y es que en el primer semestre se ha quedado a las puertas de volver a beneficio, a pesar de los menores ingresos por la ralentización de la producción mundial de coches (la cual también ha afectado a Gestamp, pero no a CIE Automotive).
El fabricante de componentes del automóvil, propiedad de la familia burgalesa que le da nombre, ha visto descender sus ingresos un 10% hasta junio, pasando de 2.401 millones de euros a 2.155 millones. En esto ha influido el hecho de que la producción mundial de coches se ha ralentizado un 0,2%, a 43,6 millones de unidades, así como la finalización de algunos programas en Norteamérica y el impacto del tipo de cambio. Sin tener en cuenta divisas y a efectos comparables por la desinversión de la planta de Ebergassing (Austria), los ingresos sólo han bajado un 5%.
Los ingresos bajan un 10% por la ralentización de la producción mundial de coches (43,6 millones de unidades, un 0,2% menos), la finalización de algunos programas en Norteamérica y el impacto del tipo de cambio
Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) ha crecido un 12%, hasta 180 millones, debido a que la mejora de la eficiencia y el estricto control de costes han compensado los menores ingresos; y el margen ebitda se ha incrementado un 1,7%, alcanzando un 8,4%. El beneficio neto de explotación (ebit) se ha disparado un 44%, a 61 millones. Y el resultado neto ha cerrado en unas pérdidas de 1,2 millones, frente al beneficio de 1,5 millones obtenido hace un año, aunque la cifra es positiva porque se aleja de los números rojos de 3,3 millones registrados en el primer trimestre y de los 6,7 millones del conjunto del año 2023... Por tanto, Antolin se queda a las puertas de volver a beneficio y gran parte de la mejora se debe al segundo trimestre, cuando ganó 2,1 millones, eso sí, aún le queda tarea por hacer porque en el mismo periodo de 2023 ganó 14,5 millones.
La compañía con sede en Burgos ha completado la venta de activos por valor de 111 millones, dentro del plan de desinversiones anunciado para este año y el próximo que en total asciende a 150 millones para fortalecer balance y reducir deuda con el fin de apoyar el plan de transformación. Claro que en el primer semestre, no ha logrado reducir deuda neta sino que la ha incrementado ligeramente, alcanzando los 1.036,8 millones, frente a los 917 millones del cierre de 2023 y los 1.011 millones del primer trimestre de este año, debido principalmente a los proyectos de desarrollo que está acometiendo. De hecho, ha destacado que los programas captados en los últimos años (5.500 millones en 2023 y 7.000 millones en 2022) impulsarán el crecimiento rentable a partir de 2025, especialmente en Norteamérica, y consideran que otro de los focos de crecimiento es India.
En paralelo, ya cerrado el primer semestre, Antolin ha completado la emisión de un nuevo bono por 250 millones a un interés del 10,37% con vencimiento en 2030, tres veces superior. Asimismo, ha llegado a un acuerdo con los bancos para renovar el crédito sindicado y extender hasta 2029 el vencimiento de 500 millones (a través de un préstamo y de una línea revolving). Así, ha refinanciado más de 750 millones de deuda con el objetivo de avanzar en su transformación y en generar un crecimiento rentable a largo plazo.
Recuerden que este fabricante de componentes de automóvil está presidido por Ernesto Antolín Arribas y su prima Emma Antolín Granet es la vicepresidenta desde el pasado 1 de enero, cargo en el que cogió el testigo a su hermana María Helena Antolín Raybaud. Esto último no ha supuesto ningún cambio de estrategia de la compañía, pues se sigue apostando por un control 100% familiar y una gestión compartida con el CEO, cargo que ejerce Cristina Blanco. El presidente, la vicepresidenta y la CEO forman junto a José Antolín Granet y Miguel Ángel Vicente el Consejo de Administración de una compañía que tiene 22.000 empleados en todo el mundo repartidos entre 130 plantas productivas, centros Just in Time (los cuales se ubican junto a fábricas de los fabricantes automovilísticos y que permite que Antolin sea el encargado de montar sus propios componentes en los vehículos) y 27 oficinas técnico-comerciales.