Atitlan mira ahora a Hispanoamérica. Sus fundadores, Roberto Centeno (hijo del famoso economista del mismo nombre y yerno de Juan Roig) y su socio bilbaíno Aritza Rodero, ponen sus ojos en Perú, tras ser rechazados por OHLA. Y es que entrarán en el socio mayoritario que controla Ecosac, segundo exportador de uva en Perú, como informa Cinco Días.

El grupo inversor valenciano, fundado en 2005, tuvo un gran 2023 en ingresos y resultado bruto de explotación (ebitda), lo que le permite aumentar sus inversiones, así como su apuesta por el sector agroalimentario. Y lo empezará a hacer participando en una ampliación de capital que se realizará en Ecosac por un valor de 92 millones de euros.

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Esta cifra supera la ampliación de capital que se llevará a cabo en OHLA. Recuerden que esta ha pasado de 100 a 150 millones, después de que sus principales accionistas (dueños del 26%), los hermanos mexicanos Luis y Mauricio Amodio, eligieran al español José Elías y al mexicano Andrés Holzer como socios.

Atitlan pretende sanear el balance financiero de Ecosac y realizar un plan de inversión para poner en producción sus 5.000 hectáreas de fincas, pues actualmente sólo tiene la mitad en producción. Asimismo, destacan que se trata de su primera inversión en Hispanoamérica y que les permitirá crecer en diversificación, al crecer en presencia no sólo allí, sino también en EEUU y Asia. Además, desde Ecosac se subraya que “Atitlan es uno de los grupos empresariales más activos en la Península Ibérica, que aporta crecimiento, sostenibilidad e innovación a diferentes industrias”, pues ha invertido más de 1.500 millones, sobre todo en España y Portugal, desde su creación en 2005. Muchos piropos para un nuevo socio que, curiosamente, no ha sido tan halagado en OHLA, donde los Amodio le dieron con la puerta en las narices.