Según Nadia Calviño, los bancos deberían remunerar los depósitos, pero según Carlos Torres, todavía no, porque hay un exceso de liquidez en el sistema. “No me cabe ninguna duda de que el sector bancario español tiene que empezar a transmitir la subida de tipos de interés en beneficio de los clientes y de los ciudadanos españoles”, afirmó la vicepresidenta primera y ministra de la cosa Económica.

Como hemos señalado, la intención del presidente del BBVA difiere al cien por cien de la opinión de Calviño, poque sigue habiendo un exceso de liquidez en el sistema. Además, insistió en que “cuando los tipos de interés estaban en negativo, tampoco a mucha parte de la clientela se le trasladaban”, es decir, se les cobró por esos mismos depósitos.

Calviño no va en las listas del PSOE, pero da lo mismo: vive en un mitin permanente, hasta cuando da los buenos días. Todo con la máxima humildad, como se pueden imaginar. “Complacencia es una palabra que no conjugamos en el gobierno de España”, afirmó después de lanzar loas a su propia gestión económica. Todo con mucha humildad, como se pueden imaginar.

Atención a esta nueva teoría fiscal: si alguien puede pagar más impuestos, se le ponen más impuestos. ¿Comprenden? La pregunta no es si son necesarios más ingresos públicos, sino si los contribuyentes pueden pagar más impuestos. Y si pueden, que los paguen. Luego veremos dónde se destinan esos fondos.

Esto viene a colación del impuesto a la banca, que Yolanda Díaz hará permanente si gobierna España, opción que Calviño no ha desechado -hacer permanente el impuesto, no que Yolanda sea presidenta-. La tesis de Calviño: se ha demostrado que los bancos -y las eléctricas- pueden asumir el impuesto sin dañar sus resultados y, sobre todo, sin dejar de financiar a empresas y particulares. Y como pueden hacerlo, pues que sigan pagando.

Torres, naturalmente, no opinó lo mismo e insistió en que es un impuesto injusto y que frena la actividad bancaria.