Miguel Stilwell es presidente y consejero delegado de EDP y de su filial verde, EDPR; ambas compañías tienen como primer accionista a los chinos de CTG y contribuyen a aumentar su fortuna
Los chinos engordan más su fortuna en la Península Ibérica, en concreto por los resultados de Energias de Portugal (EDP) y su joya de la corona, EDP Renovables (EDPR), y la evolución en bolsa de ambas los últimos cinco días. Y es que la primera ha disparado un 83% su beneficio neto en los nueve primeros meses gracias a la fuerte producción hidroeléctrica y la segunda lo ha incrementado un 7%.
EDP, que tiene como primer accionista a China Three Gorges (20,83% del capital), ha aumentado sus ingresos un 29%, a 1.467 millones de euros; y su resultado bruto de explotación (ebitda) ha crecido un 25%, a 3.820 millones. Por su parte, el beneficio neto se ha disparado un 83%, a 946 millones, gracias a la fuerte producción hidroeléctrica, frente a la sequía de hace un año, y también han contribuido las ganancias en Brasil y las dos operaciones de venta de activos realizadas en Polonia y Rumanía. Es cierto que la producción hidroeléctrica ha sido superior, pero teniendo en cuenta todas las energías, la cifra total de producción ha descendido un 11%, siendo un 85% del total de origen renovable, aunque la capacidad instalada se ha incrementado un 3%.
Eso sí, la deuda neta de EDP ha crecido un 28%, a 16.920 millones, principalmente por el aumento de la inversión en un 36%, a 3.895 millones, que en gran medida se ha destinado a la transición energética. En este proceso entre los últimos movimientos, destaca el acuerdo alcanzado con Corporación Masaveu para convertir la central térmica de Aboño en una central de gas.
Por su parte, EDPR, que está controlada en un 71,27% por EDP y en un 4,25% por el fondo soberano de Singapur GIC, no ha tenido una evolución del beneficio neto tan notable: sólo ha aumentado un 12%, a 467 millones. Respecto a los ingresos han descendido un 5%, a 1.654 millones, en especial por el descenso en un 7% en el precio medio de venta energía que fue parcialmente compensado por el ligero incremento de la generación renovable (+3%), aunque la producción verde se vio penalizada por el impacto del fenómeno meteorológico ‘El Niño’ en los parques eólicos de EEUU. Y el ebitda ha descendido un 3%, a 1.437 millones. Eso sí, la deuda neta ha crecido en 1.100 millones, respecto al cierre del año pasado, por las mayores inversiones (3.400 millones) acometidas para acelerar la transición energética.