Catalana Occidente celebra, a bombo y platillo, que Inocsa, vehículo inversor de la familia Serra, su principal accionista, vaya a lanzar una OPA para tomar el control total y excluirla de Bolsa.

Revalorización cercana al 17% hoy; en lo que va de año recupera un 35% y, en los últimos doce meses, un 39%. Esto significa que sus acciones se compran y vende por casi los 50 euros que ofrecen los Serra, lo que fulmina la prima del 18% que contempla la operación.

Cotiza en máximos de 5 años. Capitaliza por 5.070 millones respecto a los 4.300 de 2024.

Es el segundo grupo asegurador cotizado en el Mercado Continuo, por detrás de Mapfre que capitaliza por 8.860 millones.

Su valor en Bolsa supera con creces el de muchas empresas del IBEX 35. Detrás están, entre otras, Merlin, Indra, Acciona Energía o Unicaja Banco.

Han hablado de ella como una potencial candidata al IBEX pero nunca ha estado en el selectivo. El ‘problema’, por decirlo de alguna manera, es su capital flotante, la negociación media de títulos. “Tener un capital flotante muy estrecho y, además, un núcleo bastante nutrido de pequeños accionistas de largo plazo, supone que no está entre las más negociadas de la bolsa española”, señalan desde la gestora Buy and Hold y añaden que, no obstante, cuenta con la liquidez suficiente para ejecutar las órdenes de manera correcta y ordenada.

En lo que va de año, Catalana Occidente recupera un 35% y, en los últimos doce meses, un 39%. Esto significa que sus acciones se compran y vende por casi los 50 euros que ofrecen los Serra, lo quefulmina la prima del 18% que contempla la operación

El gran atractivo son sus precios... porque continúa cotizando a uno de los niveles más bajos del sector. Aun así, "se trata de una compañía muy bien diversificada, con más del 50% de sus beneficios que proceden de los seguros de crédito y, además, es una empresa familiar especialmente bien gestionada”, explica Julián Pascual, presidente y gestor de renta variable en Buy & Hold.

Sus gestores han realizado, también, una buena estrategia de compras (Seguros Bilbao, Atradius (Crédito y Caución), Mémora, Groupama, Seguros Plus Ultra, Cosalud, Antares…), en un sector muy atomizado, según los expertos.

Entonces, ¿por qué se ha tomado esta decisión? Pues, entre otras cosas, precisamente por eso, por su infravaloración. “La familia Serra ha actuado de forma inteligente lanzando una opa de exclusión por Grupo Catalana Occidente (GCO), dada la clamorosa infravaloración de la empresa durante los últimos años”, opina Julián Pascual para añadir que podrían reforzar su control sobre Grupo Catalana Occidente o incluso extenderlo al 100% del capital “aprovechando que el mercado lleva tiempo sin reconocer el verdadero valor de la compañía”.

Pero, hay más. Sergio Ávila, analista de IG, con este movimiento, la familia busca simplificar la gestión y ganar flexibilidad. “Reducir las cargas que implica ser una cotizada: informes trimestrales, auditorías públicas, supervisión constante del regulador y de los inversores, etc. No es que se quieran "esquivar controles" en el sentido estricto, pero sí operar con más discreción y menos exigencias externas. Al estar fuera del mercado, pueden tomar decisiones estratégicas sin estar tan condicionados por la presión bursátil o por tener que justificar cada paso ante miles de accionistas”.

Porque, además, salir del mercado no implica renunciar al capital. “En muchos casos, se recurre a fórmulas privadas: financiación bancaria, emisión de deuda, capital de los propios socios o inversores institucionales. Y si ya controlas la mayoría del capital, como es el caso de la familia Serra con Catalana Occidente, el mercado deja de ser imprescindible como vía de financiación”.

Los detalles de la operación, valorada en 2.277 millones, anunciada ayer tras el cierre del mercado son los siguientes, según ha informado la compañía a la CNMV: Inocsa, accionista de control de GCO que ostenta el control directo e indirecto del 62,03% de su capital social, someterá a la aprobación de su Junta General de Accionistas, el próximo 30 de abril de 2025, una oferta pública de adquisición (OPA) voluntaria dirigida a la totalidad de las acciones de GCO.

"Un precio justo", para los expertos de Buy & Hold, "debería ser al menosun 30% superior al precio de la opa, es decir debería estar en torno a los 60-70 euros por acción, lo que situaría las ratios de valoración de GCO en línea con la media histórica a la que ha cotizado

La formulación de la OPA tiene el objetivo de incrementar su control directo sobre GCO….y promover su exclusión de Bolsa.

La oferta contempla un pago efectivo de 50 euros por cada acción de GCO. “Alternativamente, los accionistas de GCO podrán optar por aceptar la oferta mediante un canje de acciones, recibiendo en contraprestación acciones de Clase B de Inocsa de nueva emisión, con los límites, términos y condiciones establecidos al respecto en el anuncio de la oferta pública2.

Esto representa una prima de, aproximadamente, un 18,3% sobre la cotización del día anterior, 23,9% sobre el precio medio del mes anterior a la publicación, 28,3% sobre el precio medio de los tres meses anteriores y el 31,0% sobre el precio medio de los seis meses anteriores.

La oferta se lanza sobre 45,55 millones de acciones, que representan el 37,97% del capital social.

“Con esta operación Inocsa desea ofrecer a los accionistas de GCO un precio muy atractivo, que supera ampliamente el máximo histórico de cotización de GCO…”, dice la aseguradora.

Aun así, "pensamos que no es un precio justo”, considera el experto de Buy & Hold.  “El precio de 50 euros por acción supone un PER de 9 veces sobre los beneficios de 2024, cuando la media histórica de los últimos 20 años (2004-2024) ha sido de 11,5 veces. Igualmente, el precio de 50 euros es equivalente a 1 vez su valor en libros frente a la media histórica de 1,6 veces.

“Un precio justo debería ser al menos un 30% superior al precio de la opa, es decir debería estar en torno a los 60-70 euros por acción, lo que situaría las ratios de valoración de GCO en línea con la media histórica a la que ha cotizado”.

Salir del mercado no implica renunciar al capital. “En muchos casos, se recurre a fórmulas privadas: financiación bancaria, emisión de deuda, capital de los propios socios o inversores institucionales. Y si ya controlas la mayoría del capital, como es el caso de la familia Serra con Catalana Occidente, el mercado deja de ser imprescindible como vía de financiación

Catalana Occidente está controlada en un 62% (el free-float es del 33,57%, y la mitad está en manos de inversores institucionales) por la familia Serra y, de seguir el curso natural, Hugo Serra (actual CEO) pasará a ser presidente de la empresa que creó su abuelo en 1959.

Jesús Serra Santamás, empresario catalán fue el fundador de la mutua de accidentes laborales Asepeyo, después presidió seguros Occidente y junto a su hermano Antonio compró Catalana Seguros. De ahí surgió el Grupo Catalana Occidente actual.

Los Serra vivían en el barrio de Pedralbes y formaban parte de la clase ‘pudiente’ catalana. En marzo de 1980, ETA secuestra a Jesús Serra Santamás que fue puesto en libertad dos meses y medio después tras el pago de un rescate por la familia del que nunca ha trascendido la cuantía.

En 1982, Jesús Serra nombra a su hijo José María director general y en 1991 consejero delegado. En 2001, le traspasa el control total de la empresa y cuatro años después muere a los 94 años.

Desde enero de 2022, Hugo Serra, hijo de José María Serra y representante de la tercera generación de la familia, es consejero delegado de Occident.

Por cierto, la aseguradora nos sorprendía, en 2023, con un cambio de nombre…, toda una declaración de intenciones detrás de la que el Grupo Catalana Occidente se unificaría en una sola entidad.

Grupo Catalana Occidente salió a Bolsa 1997. Le siguió Mapfre que dejó de ser una mutua para poder cotizar en el mercado. Lo hizo en 2007 tras su proceso de desmutualización para comenzar a captar capital público.

La última ha sido, en 2021, Línea Directa.