
El juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama ha vuelto a aplazar, por segunda vez, la declaración del expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Rodrigo Buenaventura, en la causa que investiga los informes del fondo Gotham City Research y su matriz GIP, por supuesta manipulación de mercado para lucrarse de las acciones del laboratorio catalán Grifols. La causa se abrió en noviembre del año pasado tras la denuncia de la Fiscalía Anticorrupción.
Rodrigo Buenaventura era presidente de la CNMV el 9 de enero de 2024 cuando Gotham publicó su primer informe contra Grifols en el que le acusaba de irregularidades en sus cuentas y de ocultar deuda. El laboratorio, que siempre ha negado las acusaciones, presentó una demanda contra el fondo ante el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York (Estados Unidos).
La CNMV inició una investigación (de la que poco ha trascendido) sobre la contabilidad del laboratorio y su vínculo con el vehículo inversor de la familia Grifols, Scranton. Detectó deficiencias y propuso sancionar a Grifols y a sus consejeros. Y aquí paz y después gloria.
Los títulos de Grifols cotizan en los 8,44 euros, prácticamente en el mismo nivel que hace un año. En el último mes de se deja más de un 8%, y en lo que va de año, un 10,7%
También la CNMV dijo ver indicios de manipulación del mercado en el ataque de Gothan. Del expediente que abrió el supervisor, en septiembre del año pasado, contra el fondo que dirige Daniel Yu, nada se sabe a día de hoy. A finales de 2024, vencía el mandato de Buenaventura como presidente de la CNMV. Su puesto lo ocupó Carlos San Basilio.
Lo último sobre Grifols, camino de cumplirse 15 meses de ese 'martes negro' para la farmacéutica porque sus acciones llegaron a caer hasta un 46%, es que Brookfield ha vuelto a entrar en escena. El pasado 2 de abril ambos, la familia y el fondo, confirmaron contactos para retomar las negociaciones sobre una posible OPA de exclusión. Y ese mismo día se desataba la tormenta bursátil tras el anuncio de aranceles recíprocos por parte de Donald Trump…que, además, y jornadas después aseguraba: "muy pronto anunciaremos un importante arancel sobre los productos farmacéuticos".
Los títulos de Grifols cotizan en los 8,44 euros, prácticamente en el mismo nivel que hace un año. En el último mes se deja más de un 8%, y en lo que va de año, un 10,7%.
Lo cierto es que, la ‘actuación’ de los organismos reguladores en España decepciona, por ser suaves en el comentario y no tirarnos a degüello hablando de descrédito.
La CNMV, en este caso, no ha cumplido con las expectativas, no ha estado a la altura de lo que se pide a los supervisores, en estos 15 meses de ‘culebrón Grifols’.
La CNMV tampoco actuó cuando Brookfield entró en escena y se empezó a especular sobre cuándo iba a lanzar la OPA, a qué precio y en qué condiciones. Durante todo este tiempo, los títulos de Grifols estuvieron a los pies de los caballos. Los minoristas ‘pillados’ y en la más absoluta indefensión
Y no lo ha estado desde el principio porque, lo que decía Gotham City en los diferentes informes, desde el inicio del ataque, es que la familia había vaciado la compañía (a través de un vehículo patrimonial) y que la empresa no valía nada. Y esto, son palabras mayores.
De ser así, los propietarios de Grifols habrían engañado a todos los accionistas y la CNMV debería haber estrechado el cerco sobre los Grifols, y ser mucho más dura, incluso, de lo que sería la SEC en Estados Unidos. Si no es verdad, hay que rebatirlo con datos y explicarselo a los inversores.
Recordar que la CNMV ya no actuó como se supone que debería haber actuado en enero de 2024, es decir, suspendiendo la cotización de la compañía el primer día en el que se hizo público el informe de Gotham, que inauguraba todo un culebrón de documentos filtrados posteriormente.
Pero es que tampoco lo hizo cuando Brookfield entró en escena y se empezó a especular sobre cuándo iba a lanzar la OPA, a qué precio y en qué condiciones. Durante todo este tiempo, los títulos de Grifols estuvieron a los pies de los caballos. Los minoristas ‘pillados’ y en la más absoluta indefensión.
No está de más recordar que las suspensiones son necesarias para prevenir el uso de información privilegiada y asegurar que todos los inversores dispongan de los mismos datos para decidir cómo deben actuar. También quedó en entredicho la actuación de la CNMC respecto a la OPA del BBVA sobre el Sabadell.
Un año ha pasado y todavía los inversores esperan su dictamen. El organismo que dirige Cani Fernández ha pasado a fase 2 el análisis de la documentación presentada por ambos bancos.
“En este momento, la Comisión está observando la potencial situación en el segmento de pymes”, explican los expertos, y…lo más preocupante es que el análisis de Competencia sólo incluye al 5% de las pymes y al 1% del volumen del crédito a pymes, del Sabadell.
El pasado 2 de abril, la familia Grifols y el fondo Brookfield confirmaron contactos para retomar las negociaciones sobre una posible OPA de exclusión
En otras palabras, la CNMC deja fuera al 95% de las pymes, clientes del Sabadell, en primer lugar, porque sólo se fija en aquellas empresas cuya financiación depende exclusivamente de Sabadell y BBVA. Aquellas con un tercer banco implicado no entran en el análisis de Competencia.
Dicho de otra manera, si no cambian las cosas, las conclusiones de la CNMC podrían no reflejar el impacto real de la fusión BBVA-Sabadell sobre las pymes catalanas y valencianas, las más afectadas por la operación.