Florentino Pérez, presidente de ACS
Florentino Pérez está de enhorabuena. Así es. Ha renovado como presidente del Real Madrid, y Donald Trump llega a la Casa Blanca.
En cuanto al primer asunto. Yo no soy futbolera, pero sé que ayer fue reelegido como presidente de su particular ‘casa blanca’. Quinto mandato consecutivo, y sin nadie que le plante cara, que le llevará hasta 2029, con 81 años a la espalda.
Florentino no tiene contrincante alguno desde 2009 cuando se inició su segunda etapa en el Madrid, tras estar apartado del fútbol casi cuatro años.
Me dice, mi fuente particular (no precisamente merengona) que no hay quién cumpla con los requisitos establecidos por el club para poder postularse a la presidencia. Especialmente, con este: “Todo el que quiera ser candidato a la presidencia del Real Madrid tiene que presentar un aval bancario por el 15% del presupuesto del club blanco en ese año… "con la única y exclusiva garantía de su patrimonio personal".
En 2018, Donald Trump anunció 200.000 millones de dólares para un plan de inversión en infraestructuras a diez años que, finalmente, quedó suspendido por el cambio en la presidencia, y que ahora, durante su segundo mandato, quiere recuperar
Bien, pero vamos a lo que nos ocupa en esta sección porque, de momento, lo que ocurra en el mundo del futbol no impacta en la Bolsa, al menos en el parqué español…,pero los cambios en el Gobierno de Estados Unidos, parece que sí.
“Estados Unidos es el principal mercado para ACS a través de su filial Turner, y concentra más del 58% de sus ventas que han mejorado un 14,3% hasta los 13.585 millones de euros. Ha aumentado significativamente sus adjudicaciones en un 32%, hasta los 19.307 millones de euros, lo que le ha impulsado su cartera de proyectos hasta los 30.031 millones, según las últimas cuentas presentadas por la compañía.
“Turner incrementa de manera exponencial el flujo de caja lo que nos hace ser positivos especialmente en Estados Unidos donde la situación económica es diferente a la de otras regiones”, opinan los expertos para los que se debe celebrara que los resultados de ACS dependan de una economía que crece a tasas del 3% y en la que el consumo sigue fuerte.
Recordar que Turner Construction Company es especialista en edificación y que, por ejemplo, será la encargada de levantar el nuevo centro de datos para Meta en EEUU por 10.000 millones de dólares.
ACS capitaliza por 13.094 millones, desde los 13.159 en los que cerró 2023. La compañía va camino de duplicar el valor de mercado que tenía en 2022 y que ascendía a 7.600 millones
A todo esto, hay que añadir “que podría beneficiarle en los primeros años es el tipo de cambio, ya que si se imponen aranceles y los tipos de interés no cambian demasiado hasta que Powell deje el cargo, el dólar se fortalecerá y esto repercutirá de manera positiva en sus cuentas. Además, si las compañías comienzan a retornar la producción a Estados Unidos es probable que ACS sea una de las principales contratistas”, señala Javier Cabrera, analista de mercados.
Estados Unidos es deficitario en vías de conexión como las carreteras, a lo que hay que sumar la necesidad que tiene de modernizar obras civiles para facilitar la conexión de su inmenso territorio
En 2018, Donald Trump anunció 200.000 millones de dólares para un gigantesco plan de inversión en infraestructuras a diez años que, finalmente, quedó suspendido por el cambio en la presidencia, y que ahora, durante su segundo mandato, quiere recuperar.
Así que, para que ACS se nutra de la estrategia del nuevo presidente es importante que, tal y como acaba de anunciar la compañía, se haya completado la integración de dos de sus filiales en el país: Flatiron y Dragados North America se han convertido en “la segunda mayor empresa de ingeniería civil y construcción de Norteamérica”.
“FlatironDragados, que está presente en 24 estados de EE. UU. y ocho provincias canadienses, inicia 2025 con una cartera de pedidos de 18.500 millones de dólares”.
Turner Construction Company es especialista en edificación y, por ejemplo, será la encargada de levantar el nuevo centro de datos para Meta en EEUU por 10.000 millones de dólares
Sin embargo, advierte Javier Cabrera, “los aranceles podrían impactar en las materias primas que use ACS, incrementando los costes. A esto habría que sumarle la posibilidad de que aumente el coste de la mano de obra por expulsión de inmigrantes”, anunciada por el nuevo inquilino de la Casa Blanca.
ACS cotiza por encima de los 48 euros, prácticamente los mismos niveles en los que comenzó el año. En los últimos doce meses sube un 22%
Capitaliza por 13.094 millones, desde los 13.159 en los que cerró 2023. La compañía va camino de duplicar el valor de mercado que tenía en 2022 y que ascendía a 7.600 millones.