Viñolas, que ha comparecido junto al presidente, Juan José Brugera, ha insistido en que repartir el dividendo prometido es posible por "la solidez de los fundamentales de la compañía y la exitosa ejecución del plan estratégico"
Colonial sufre la variación del valor de sus activos en sus cuentas de 2022. En su primer trimestres se anotó unos buenos resultado, lo mismo en el segundo trimestre de su año fiscal, con un aumento del 116% en el beneficio, y en el tercer trimestre, lo duplicaban, alcanzando los 398 millones de euros.
La socimi está controlada por el fondo soberano de Catar (QIA), que es dueño del 19,028%, y por el ingeniero mexicano Carlos Fernández González, que dirige el grupo Finaccess. Juan José Brugera y Pere Viñolas, son, respectivamente, presidente y CEO de Colonial. Recordemos que el pasado mes de marzo, el propio Brugera explicaba que, al cumplir los 75 años, la ley francesa le obligaba a dejar la presidencia de su filial en ese país, SFL, si bien continuaría en la socimi como presidente no ejecutivo. De esta manera, las funciones ejecutivas las asumiría Viñolas.
La socimi cotizada en el Ibex 35 ha informado de que su beneficio neto en 2022 fue de 8 millones de euros, lo que supone una caída del 98% respecto a los 474 millones de euros del año anterior. El consejero delegado, Pere Viñolas, ha explicado que el valor neto de los activos (que tiene en cuenta las inversiones) descendió un 1,7%, hasta los 6.384 millones de euros, lo que explicaría la caída en el beneficio, lo cual no afectaría a la caja de la compañía. Por lo que el resultado recurrente aumentó un 26%, hasta los 161 millones de euros.
Colonial ingresó por rentas de alquiler de sus espacios un 13%, lo que supone 354 millones de euros, y también mejoró su resultado bruto de explotación (Ebitda) un 14%, llegando a los 283 millones de euros. Estos aumentos se deben a dos factores principalmente, los contratos están indexados al IPC, por lo que la inflación disparada ha hecho que el precio crezca automáticamente. Además, se han firmado nuevos contratos en sus edificios de oficinas, lo que supuso 177.000 metros cuadrados de contratos. Por su lado la ocupación de sus inmuebles llegó al 96%.
"Nuestra capacidad para capturar incrementos de rentas por encima del mercado y el exitoso desarrollo de nuestra cartera de proyectos nos han llevado a alcanzar uno de los mayores ingresos de nuestra historia y a obtener crecimientos de doble dígito en los principales indicadores de nuestro negocio", ha asegurado Viñolas.
Una de las grandes noticias de la cuenta de resultados es la reducción de la deuda en 421 millones de euros, hasta los 4.934 millones. Lo que se debió al aumento de liquidez, hasta los 2.645 millones de euros, y un plan de desinversiones que está llevando a cabo la compañía. Este plan contempla 500 millones de euros en desinversiones, de los que 84 millones ya se llevaron a cabo en 2022, asimismo ya están finalizando la venta de otros seis activos por valor de 420 millones de euros.