La venta de viviendas vuelve a bajar en marzo, con un descenso del 5,7% respecto al año anterior, registrándose la firma de 55.778 transacciones, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE). En tasa intermensual (marzo sobre febrero), la compraventa de viviendas subió un 11%.

Con este retroceso interanual, la compraventa de viviendas encadena dos meses de tasas negativas después de que en febrero disminuyera un 6,6%. Aunque no debemos olvidar que la racha positiva ya se rompió en diciembre, cuando la compraventa disminuyó un 10,2%, desde ese mes, sólo en enero se han registrado tasas positivas. 

Esta caída la vienen anunciando todos los expertos: los notarios ya alertaron en marzo y el portal inmobiliario Idealista advirtió sobre los datos del INE, que elabora su estadística con los datos de Registradores de la Propiedad, "que llevan un decalaje aproximado de dos meses respecto a los notarios", lo que hace que la tendencia del mercado se refleje con meses de retraso. 

Cae la compraventa de viviendas tanto nuevas como usadas. Así, la compraventa de viviendas usadas bajó un 5,3% en el tercer mes del año, hasta sumar 45.309 operaciones, mientras que las transacciones realizadas sobre pisos nuevos disminuyeron un 7,5%, hasta las 10.469 operaciones.

El 92% de las viviendas transmitidas por compraventa en marzo fueron viviendas libres y el 8%, protegidas. En total, la compraventa de viviendas libres bajó un 6% interanual, hasta las 51.302 operaciones, en tanto que la compraventa de viviendas protegidas retrocedió un 2,8%, hasta sumar 4.476 transacciones.

Y ojo, porque el precio de la vivienda usada se estancó en marzo. A lo que hay que sumar que estos datos llegan el día después de la aprobación de la Ley de Vivienda, que traerá una fuerte intervención en el mercado: topes en el alquiler y una persona con cinco inmuebles se considerará 'gran tenedor', lo que afectará de lleno al mercado inmobiliario, aunque tendremos que esperar unos meses para ver sus efectos en las transacciones de viviendas.  

Sin perder de vista que, como decíamos esta misma mañana en Hispanidad, los tipos de interés y la okupación están destruyendo el mercado inmobiliario. Los tipos de interés al alza, una medida buena de suyo, y el euribor disparado, encarecen las hipotecas y mucha gente se retrae de la compra de vivienda, una de las claves de la economía española,