Bob Chapek seguirá siendo el primer ejecutivo de la factoría de Mickey Mouse y está comprometido con la agenda LGTBQ
The Walt Disney Company continuará con su agenda LGTBI y la perversión de menores (o “corrupción de menores”, como la denomina Santiago Abascal, líder de Vox). Y es que su consejo de administración ha aprobado por unanimidad la extensión del mandato de Bob Chapek como CEO durante tres años más.
La presidenta del gigante de ocio y entretenimiento, Susan E. Arnold, quien además es lesbiana, ha destacado que “Bob es el líder adecuado en el momento adecuado para The Walt Disney Company, y la junta tiene plena confianza en él y en su equipo”. Recuerden que Chapek fue el promotor de desfiles del Orgullo LGTBI en los parques temáticos, reconoció que había agenda LGTBI en los contenidos y a finales de 2020, anunció 50 estrenos donde no faltarán ejemplos de la agenda LGTBQ. Además, hace unos meses, Chapek se enfrentó al gobernador del estado de Florida, el republicano Ron DeSantis, por la ley que impide adoctrinar en las aulas a los niños sobre las tesis LGTBI y la ideología de género, y escribió un correo a los empleados, señalando que suspenderán las donaciones políticas en dicho estado porque “no sólo es un problema sobre un proyecto de ley en Florida sino otro desafío a los derechos humanos básicos” y se disculpó: “Necesitabais que fuera un aliado más fuerte en la lucha por la igualdad de derechos y os defraudé. Lo siento”. Eso sí, DeSantis no se achantó y respondió con que podría revocar el autogobierno del distrito especial del parque Disney World, es decir, sus privilegios fiscales.
A finales de 2020, Chapek anunció 50 estrenos donde no faltarán ejemplos de la agenda LGTBQ y hace unos meses, se enfrentó al gobernador del estado de Florida, Ron DeSantis, por la ley que impide adoctrinar en las aulas a los niños sobre las tesis LGTBI y la ideología de género, pero el republicano no se achantó
Tras la extensión de su mandato como CEO, cargo que asumió en febrero de 2020 tomando el relevo de manos de Robert Iger, Chapek ha señalado: “Comencé en Disney hace casi 30 años y hoy tengo el privilegio de liderar una de las compañías más grandes y dinámicas del mundo, brindando alegría a millones de personas en todo el mundo”. A sus 61 años, lidera la gestión de la factoría de Mickey Mouse, pero en su trayectoria allí también ha tenido otros puestos destacados: director de Disney Consumer Products y presidente de distribución, presidente de Disney Parks & Resorts, y presidente de Disney Parks, Experiences y Products.
En los últimos tiempos, el gigante de ocio y entretenimiento ha dejado de hacer contenidos tan inocentes como debería, pues gran parte se dirige a los niños, convirtiéndolos en adoctrinamiento en los postulados del Nuevo Orden Mundial (NOM): o sea, en ideología de género (feminismo y homosexualismo) y en ateísmo (mucho panteísmo y nada de Dios), principalmente. Esto se ve muy bien en la fuerte apuesta por la agenda LGTBI, bajo las riendas de Arnold y Chapek, y que respaldan otros muchos directivos, pese a que ya le salen críticas hasta entre sus empleados homosexuales y diversas polémicas: la última por el beso lésbico en la película de dibujos animados Lightyear, que confunde a los niños, según ha advertido un líder provida mexicano: en su estreno fue un fracaso en taquilla, también afronta la prohibición en varios países, así como rechazo en otros y también entre numerosos padres (incluyendo una recogida de firmas en Italia), y críticas en las redes sociales. Asimismo, Disney donará lo obtenido con las ventas de la colección Pride a jóvenes y familias del colectivo y anuncia el desfile del Orgullo en París.
Disney no sólo apuesta por la agenda LGTBI y la perversión de menores, también por la cultura de la muerte: forma parte del grupo de millonarios y empresas que financian abortos. Al igual Amazon, Starbucks, Levi’s, Apple, Microsoft, Netflix, Tesla, Meta… pagará gastos de viaje a empleadas para abortar
Pero Disney no sólo apuesta por la agenda LGTBI y la perversión de menores, también por la cultura de la muerte: forma parte del grupo de millonarios y empresas que financian abortos. Y es que al igual Amazon, Starbucks, Levi’s, Apple, Microsoft, Netflix, Tesla, Meta…, entre otras compañías, pagará gastos de viaje a empleadas para abortar, después de que el Tribunal Supremo de EEUU proclamó el derecho de la vida, al pronunciarse sobre el caso Dobbs contra la Jackson Women’s Health Organization anulando el fallo de Roe vs. Wade (este legalizó el aborto en 1973). Así puso fin a la protección legal del aborto y dio inicio a la batalla por la vida y a partir de ahora cualquier estado puede prohibir el aborto o incluso se podría aprobar una ley federal para derogarlo a nivel nacional.
Por último, un vistazo a los últimos resultados de Disney: su último año fiscal (octubre de 2020 a septiembre de 2021) fue flojo y en el presente ha habido un poco de todo. En su primer trimestre fiscal (octubre a diciembre de 2021), creció en suscriptores y mejoró en cifras al recuperar el negocio de parques, pero quedó patente su falta de ideas y su insistencia en la agenda LGTB; mientras en el segunto (enero a marzo de 2022) el desempeño fue desastroso con una caída del beneficio del 48%. Eso sí, en su primer semestre fiscal (octubre de 2021 a marzo de 2022), el beneficio neto ha sido de 1.493 millones de euros (+71,4%) y los ingresos han ascendido a 38.964 millones (+29%) -de estos, 26.593 millones fueron aportados por medios y entretenimiento, y 13.176 millones (+105%) por la división de parques-. Además, ha seguido ganando suscriptores en sus plataformas de streaming, no como Netflix.