The Walt Disney Company ha recibido un revés con la última película sobre Blancanieves, el personaje creado por los hermanos Grimm y del que sigue sacando tajada. Blancanieves es un filme -esta vez en versión humana- de cuando la factoría de Mickey Mouse aún apostaba por la ideologíawoke (el último invento ideológico del progresismo) y que acumula unas cuantas polémicas tanto anteriores como posteriores a su estreno.

El gigante de ocio y entretenimiento ha tenido una recaudación de unos 81 millones de euros en sus primeros días en los cines de todo el mundo, de los que unos 40 corresponden sólo a los de EEUU y Canadá. Sin embargo, estas cifras no han cumplido las expectativas: por ejemplo, en EEUU ha recaudado unos 3,2 millones, pero se estimaba alcanzar entre 41,7-51 millones. Asimismo, la película también ha recibido malas críticas. Eso sí, en España, se ha colocado en el número uno en su primer fin de semana, con más de 293.000 espectadores, y ha recaudado 2,2 millones. Claro que no hay que perder de vista que la película no fue precisamente barata porque su presupuesto ascendió a unos 249,5 millones, según ha referido Forbes. Y todo esto se ha podido ver destacado en la red social X. 

 

 

El filme ya generó polémicas antes de su estreno por varias razones y por demasiada necedad y aspectos políticamente correctos. Entre ellas, la de haber utilizado a enanitos creados por ordenador... para no ofender. Disney al final cedió ante el famoso actor Peter Dinklage (muy conocido por la serie Juego de Tronos) cargó contra la citada versión de Blancanieves por ser una “maldita historia retrógrada sobre siete enanos”. Sin embargo, los enanitos creados por ordenador no han gustado nada a otros muchos, entre ellos, a la actriz Choon Tan, que ha referido que esto perjudica a las carreras de los actores del colectivo.

En la nueva Blancanieves, tampoco hay un príncipe, sino un pobre, que le da el beso a la protagonista. Y por supuesto, este beso es pre-consentido... para no ser tildado como un gesto de acoso o de abuso sexual. Al mismo tiempo, hay que referir que en el cuento original de los hermanos Grimm en el que se basa la película se refería que Blancanieves era “tan blanca como la nieve y más bella que ninguna”, pero en la nueva versión de Marc Webb se ha elegido para protagonizarla a la actriz Rachel Zegler, que no es tan blanca ni bella, y a Gal Gadot para dar vida a la malvada madrastra. Además, Zegler mostró su apoyo a la causa palestina tras el último conflicto entre Israel y el grupo terrorista Hamas que empezó el 7 de octubre de 2023... mientras que Gadot es una actriz israelí. 

Al hilo del estreno de una de las últimas películas de la era woke, cabe recordar que Disney renunció a dicha ideología progresista principalmente por una cuestión económica. Al mismo tiempo, ha abandonado su programa de Diversidad, Equidad e Inclusión, es decir, está volviendo a la sensatez, como otras muchas empresas... y más después de que Donald Trump volviera a la Casa Blanca. Eso sí, la factoría de Mickey Mouse aún debe resolver algunos problemas, como la pérdida de suscriptores en streaming