Ha sido una sorpresa, porque el presidente de Fundación Telefónica siempre ha sido el presidente de la propia compañía Telefónica. Hasta su cese, lo era José María Álvarez Pallete. Pero ahora no, Enrique Goñi ha sido nombrado presidente ejecutivo de una fundación con un presupuesto nada desdeñable, que roza los 60 millones de euros anuales.
Igualmente, llama la atención que no ha cambiado de puesto, dado que Goñi hará compatible su nuevo cargo con el actual: adjunto a la presidencia de Caixa-Criteria, con responsabilidades, entre otras, en comunicación.
Goñi abandonó la primera línea bancaria toda vez que la Caja de Ahorros de Navarra (CAN), que lideraba, fue absorbida por Caixabank. Siendo Criteria el propietario del 10% de Telefónica, es de suponer que la propuesta ha partido de Caixa-Criteria.
En cualquier caso, Goñi está teniendo un papel activo en la nueva Telefónica que preside Marc Murtra. No en vano, participó en la ceremonia de cese de José María Álvarez Pallete, quien fue llamado a Moncloa para comunicarle su destitución.
En estos momentos, Fundación Telefónica, principalmente orientada a la educación de los niños del Tercer Mundo, utilizando procedimientos electrónicos, se está replanteando todas sus actuaciones y la orientación que quiere darse a esta ONG empresarial.
