Ford ha disfrazado el nuevo ERE (el cuarto desde 2020) en la planta de Almusafes de ERTE. Pero, en cualquier caso, reduce presencia industrial en nuestro país y producción, pues de cinco modelos en su planta valencia ahora sólo fabrica uno (el Kuga)... y queda demasiado para que a mediados de 2027 llegue el último modelo que le han adjudicado (un coche de “transición” de cara a los modelos 100% eléctricos).

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El fabricante automovilístico estadounidense decidió castigar a nuestro país anunciando un nuevo ERE para 1.622 empleados de la planta de Almusafes, el 34% de su plantilla (que en total asciende a 4.800 personas), un mes después de haberle adjudicado el nuevo modelo para 2027. Una noticia que reflejó, tristemente, otro ‘acierto’ de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz: él volvió a ser gafe porque presumió de que el nuevo modelo “garantiza la viabilidad de la planta” y un mes después se anunciaron más despidos; y ella se lió con los resultados mundiales y los de España.

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Dejando esto a un lado, estos días se han producido nuevas reuniones entre Ford y el sindicato UGT... y han acabado en pactos. Por un lado, se han acordado 626 despidos... vía salidas voluntarias y prejubilaciones. Un nuevo golpe para el bolsillo de todos los españoles, permitido por los ministerios de Trabajo (Yolanda Díaz) y Seguridad Social (Elma Saiz). Y es que se podrán acoger los empleados que cumplan 53 años a partir de 2024, los que tengan 54 recibirán un complemento a la prestación de desempleo hasta cumplir los 57 del 75 % de salario, que ascenderá al 80% para los de 55 y 56 años. A esto se suma que cotizarán hasta los 62 años los que se acogen a prejubilaciones teniendo 53, y hasta los 63, 64 y 65, respectivamente, para los que tienen 54, 55 y 56. Además, para las salidas voluntarias se ha fijado una bonificación de 40.000 euros brutos si se acepta antes del 31 de este mes, que bajará a 30.000 para los que se apunten antes del 15 de septiembre, y a 20.000 para los que lo hagan antes del 31 de diciembre.

En paralelo, Ford y UGT han pactado un ERTE para 996 trabajadores hasta final de año, que supondrá parar por completo durante 25 días de aquí a final de año tanto en las líneas de ensamblaje de coches como en la planta de motores. Y para después y hasta 2027, confían en que el Gobierno saque adelante un mecanismo temporal que les permita mantener a esos 996 empleados que ahora consideran “excedentes” hasta que aumente la carga de trabajo con la llegada del nuevo modelo a mediados de 2027.