A Mark Zuckerberg no le gusta la libertad de expresión: la gente empieza a pensar por sí misma y claro...
Mark Zuckerberg no tiene buen perder y ante la primera crisis seria que afronta Facebook (ahora Meta) ha arremetido contra los 78.000 empleados del grupo. “Siendo realistas, probablemente haya un montón de personas en la empresa que no deberían estar aquí”, afirmó en una reunión interna celebrada esta semana, según The New York Times.
Efectivamente, Facebook afronta la peor crisis de su historia, según el propio Zuckerberg, que comenzó el 3 de febrero pasado cuando la compañía rebajó las previsiones de crecimiento para este año y tras admitir que había perdido un millón de usuarios, algo que nunca antes le había sucedido. Todo unido al lanzamiento del metaverso, anunciado a finales de octubre, que requerirá inversiones millonarias durante años.
De boca de Zuckerberg, sin embargo, no ha salido ni una palabra de autocrítica y sí advertencias a los trabajadores, que tendrá que trabajar más por menos. Eso los que continúen en la compañía porque, aunque no lo anunció, lo más probable es que realice ajustes de plantilla en los próximos meses.
Facebook atraviesa la peor crisis de su historia, también en bolsa. La cotización continúa en caída libre y ha pasado de los 323 dólares por título del día 2 de febrero, a los 160 dólares del pasado lunes. La culpa, en cualquier caso, no es de Zuckerberg.