Galán llegó a Iberdrola en 2001 y un año después cambió bastante el logo, ahora, 21 años después, lo convierte en más eficiente energéticamente
Ignacio S. Galán (72 años) ha tardado 21 años en simplificar el logo de Iberdrola.... y que ahora será más eficiente energéticamente. ¡Prrrrrr! “El nuevo logotipo es un 50% más ligero, lo que garantiza un consumo energético menor, una velocidad de descarga más ágil y, consecuentemente, un ahorro de energía, costes y tiempo”, presume la eléctrica.
El ingeniero y empresario salmantino fue reelegido hace casi un mes como presidente ejecutivo de Iberdrola por, al menos, otros cuatro años, en una junta muy digital. Recuerden que lleva a los mandos 22 años, en concreto desde el 21 de mayo de 2001, cuando fue nombrado vicepresidente y primer ejecutivo, y unos años después, en 2006, ascendió a presidente, manteniendo el cargo de CEO (este último lo ha soltado hace unos meses en manos de Armando Martínez para contentar a los fondos -sobre todo a BlackRock- y al mercado, pero seguir mandando lo mismo).
En 2002, fue cuando Iberdrola cambió su nombre a color verde para manifestar también visualmente su apuesta por la sostenibilidad y eligió como símbolo tres hojas de colores (la verde ligada a las energías renovables, la azul a la hidráulica y la eólica, y la naranja a la energía solar y al gas). Ahora ha optado por una ligera evolución para adaptarse a un mundo cada vez más digital con “una tipografía más moderna con letras en minúsculas “que transmiten mayor cercanía”, como explica la eléctrica en dos páginas y media y un vídeo. Ahora también simplifica el diseño de las tres hojas y deja aún más claro “el compromiso de Iberdrola con el planeta: la energía renovable, a través del verde; el agua y el viento con el color azul; y el sol, a través del naranja”.
La eléctrica ha referido que ha contado con la colaboración de Design Bridge and Partners, compañía especializada en temas de branding del Grupo WPP (el mayor grupo publicitario del mundo). Sin embargo, no dice cuánto le ha costado la evolución de su logo. Al hilo de esto cabe recordar que hace años el cambio de la antigua Caixa Catalunya por Catalunya Caixa costó unos 600 millones de euros. Teniendo en cuenta que la evolución del logo la ha hecho WPP no será barato, claro que Iberdrola tiene dinero... y en parte es porque Galán ha convertido las renovables en un producto financiero para sacar jugosas plusvalías, y ahora incluso cobrará del Banco Mundial... y encima presumirá de filántropo.