En la 50ª reunión anual de la patronal gasista Sedigas, parece que Arturo Gonzalo, CEO de Enagás, ha puesto algunos deberes a la vicepresidenta ecológica y actual cabeza de lista del PSOE para las elecciones europeas del 9-J a Teresa Ribera. Y es que ha referido que “si queremos más Europa, necesitamos más infraestructuras, o sea, más redes, y más recursos”. 

Gonzalo puede presumir de haberle dado su primer cargo público a Ribera, siempre dentro del mundillo de gestores energéticos afines al PSOE pero la falta de inversión pública del Gobierno empieza a afectar a su gestión.

En paralelo, el CEO de Enagás ha apuntado al informe elaborado por Enrico Letta (en el que entre otros aspectos, se considera energía, telecomunicaciones y mercados financieros como sectores estratégicos), donde se habla de que debe haber “una red europea del hidrógeno”. De nuevo, el CEO de Enagás apuesta -y mucho- por la ruina del hidrógeno verde.

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En cualqueir caso, merece la pena destacar su alusión al hecho de que “necesitamos más infraestructuras” y más en plena campaña electoral para el 9-J, porque el Gobierno de Pedro Sánchez no está haciendo lo mismo que el de Giorgia Meloni en Italia, quien sí está apostando por invertir en redes. Como saben, Ribera se va a Europa, por ahora, pero deja el sector eléctrico hecho un caos por la falta de inversiones en las redes y porque no hay competencia real. En el caso de las redes eléctricas (tarea de Ribera y de la exministra Beatriz Corredor, presidenta de Redeia, compañía transportista de luz y gestora del sistema eléctrico español que es propiedad del Estado en un 20%) ya hay problemas de colapso en las conexiones de renovables y en el suministro registrando apagones, y también que se pierden millones en producción de renovables. Al hilo de la falta de inversiones en redes, en los últimos meses, José Bogas, CEO de Endesa, ha advertido que es “crítico” y “urgente” invertir en redes... o será imposible la transición energética y en la misma línea, Francisco Reynés, presidente y CEO de Naturgy, también ha pedido aumentar el límite anual a la inversión en redes de distribución de electricidad. Desde el Gobierno aún no se han dado pasos, pese a que Ribera llegó a abrir la puerta a elevar dicho límite... y ante el 9-J no parece que vaya a haber cambios pronto.

Gonzalo destaca que de los 130 proyectos presentados a la subasta del Banco Europeo del Hidrógeno, 46 eran españoles y con un precio promedio de 5,8 euros por kilogramo, frente a los 20 alemanes con un precio de 11,6 euros

Respecto a las infraestructuras gasistas, Gonzalo no ha perdido la oportunidad de referir que la crisis energética surgida con el inicio de la guerra de Ucrania puso en valor que nuestro país tiene “una infraestructura muy robusta y una gran diversificación para garantizar el suministro de España y contribuir al del resto de Europa. Entre dicha infraestructura, ha destacado las plantas regasificadoras y los almacenamientos subterráneos, que tienen un nivel de “llenado 20 puntos superior al de Europa”. Además, en el viejo continente se han puesto en funcionamiento ocho plantas flotantes para regasificación y “Enagás está presente en la construcción de la primera planta de gas natural licuado (GNL) terrestre en Alemania”. “Europa ha respondido a una de sus mayores desafíos existenciales, plantando cara a Putin, y ha reemplazado el 70% del gas ruso”.

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Dentro de la apuesta por los gases renovables, Gonzalo ha cometido el error de destacar más el hidrógeno verde que el biometano, que ya es una tecnología madura y donde España tiene potencial para sustituir el 45% de la demanda de gas natural. Respecto al hidrógeno verde, el CEO de Enagás, ha afirmado que “España tiene una oportunidad para estar a la vanguardia en hidrógeno verde a gran escala y a mitad de precio que el principal consumidor (Alemania), y con toda la infraestructura de transporte y distribución a punto”, al hilo de que de los 130 proyectos presentados a la subasta del Banco Europeo del Hidrógeno, 46 eran españoles y con un precio promedio de 5,8 euros por kilogramo, frente a los 20 alemanes con un precio de 11,6 euros. Además, al hilo del hidrógeno verde, ha referido que la demanda industrial será protagonista en la primera década, pero una tercera parte se dará “en el ámbito de la movilidad para descarbonizar el transporte marítimo, la aviación y el transporte pesado y de larga distancia de mercancías y pasajeros”. 

El CEO de Enagás considera que Europa puede “ganar el terreno perdido en la transformación frente a otros actores (EEUU y China)” si cuenta con una “infraestructura robusta y que acelere la descarbonización”. Al hilo de este proceso, ha subrayado que se debe hacer “del modo más eficiente y teniendo en cuenta a todos los actores”, con “la seguridad de suministro y la descarbonización siempre de la mano”, con “la competitividad” como prioridad (algo en lo que coincide con el presidente de Sedigas, Joan Batalla, y con el presidente y CEO de Naturgy, Francisco Reynés), con “más Europa” y con “colaboración y unión”.