Galán (Iberdrola) y Entrecanales (Acciona y Acciona Energía), en el punto de mira ante la postura de Trump contra los molinos de viento
Iberdrola y Acciona Energía (filial de energías renovables controlada por Acciona en un 86,8%) están en el punto de mira ante la toma de posesión de Donald Trump y el inicio de su segundo mandato como presidente de EEUU. ¿El motivo? Su posible política en contra de la energía eólica, pues hace unas semanas señaló: “Vamos a intentar que EEUU tenga una política en la que no se construyan molinos de viento”.
Por ahora, se sabe que Trump apuesta por los combustibles fósiles y las perforaciones petrólíferas, frente al ecologismo radical de Joe Biden. Es más, considera que “están llenando nuestro país de basura”, por lo que “nadie los quiere y son muy caros”, y hasta ha llegado a decir que “están volviendo locas a las ballenas”. En su red social Truth Social, ha señalado que los molinos “son un desastre económico y medioambiental. No quiero que durante mi Administración se construya ni uno solo (…). La energía más cara, sólo funciona con enormes subsidios gubernamentales, que ya no pagaremos”.
Claro que su posición contraria a los molinos de viento no es nueva, sino que viene de lejos y no se limita a su país. Hace unos años, trató de impedir la instalación de un parque eólico cerca de su lujoso campo de golf en Escocia e incluso afirmó que “si tienes un aerogenerador cerca de tu casa, felicidades, tu casa ha perdido el 75% de su valor. Y dicen que el ruido causa cáncer”. Además, ahora ha cargado contra proyectos de Reino Unido a través de su red social, Truth Social: “El Reino Unido está cometiendo un gran error. ¡Abran el Mar del Norte y desháganse de los molinos de viento!”.
Conviene referir que EEUU es el segundo país del mundo, tras España, donde las citadas energéticas tienen mayor capacidad instalada de energías renovables. Algo que no ha pasado inadvertido entre los inversores: la cotización de Iberdrola baja un 0,30%, mientras que la de Acciona Energía sube 0,80% y la de Acciona lo hace un 0,54%, frente a un Ibex que se mueve también en verde (+0,61%) a hora y media del cierre de sesión.
Iberdrola, a través de su filial Avangrid (la cual controla al 100% desde hace unos meses), cuenta con 10.373 megavatios (MW) instalados en suelo estadounidense y repartidos entre varias energías: 8.045 de eólica terrestre, 156 de eólica marina, 118 de hidroeléctrica, 1.201 de solar, 204 de ciclos combinados de gas y 636 de cogeneración. Así, produce 18.627 gigavatios-hora (GWh) de electricidad y cuenta con 3 millones de puntos de suministro. Además, a través de Avangrid, la compañía estará presente en la toma de posesión de Trump.
Hace diez meses, la eléctrica que preside Ignacio S. Galán anunció unas inversiones de 41.000 millones de entre 2024 y 2026, actualizando así el plan estratégico que lanzó en noviembre de 2022. De dicha cifra, 21.500 millones (60% del total) se destinarán a redes, principalmente en EEUU, Reino Unido, Brasil y España. Entre el resto de inversiones se destacó: la compra del 18,4% de Avangrid, así como “una inversión selectiva en renovables” de 15.500 millones (5.000 millones los aportarán sus socios en proyectos en curso) y más del 50% se centrarán en eólica marina en EEUU, Reino Unido, Francia y Alemania; y 1.500 millones en almacenamiento. Actualmente, los estados de Oregon y Texas son los que cuentan con mayor número de instalaciones, con 16 y 7, respectivamente.
La postura de Trump es para tener en cuenta porque EEUU figura entre los destinos donde Iberdrola prevé mayores inversiones, seguido de Reino Unido y España. En este último, por ahora, la atención está puesta en el duelo que mantiene con Repsol, en especial en el País Vasco. Al hilo de esto último, le vendrá bastante bien que Andoni Ortuzar no haya renunciado a la presidencia del Euzkadi Buru Batzar (el comité ejecutivo nacional del PNV), sino que optará a un cuarto mandato... si así lo ratifican los afiliados del PNV en la novena Asamblea General que se celebrará los días 29 y 30 de marzo en San Sebastián.
Por su parte, Acciona Energía contaba con una capacidad instalada de 2.622 MW al cierre del primer semestre de 2024, entre eólica y fotovoltaica. Entre estos activos, destacan diez parques eólicos que suman más de 1.000 MW, la planta termosolar Nevada Solar One (de 64 MW) y cuatro plantas solares en construcción, así como la compra de Cunningham Battery Energy Storage System (la mayor planta de este tipo en Texas). Además, la matriz, Acciona, cuenta con proyectos de infraestructuras y de agua (como la desaladora de Tampa Bay).
Y no hay que olvidar el divorcio entre las dos ramas familiares del primer accionista que se ha anunciado recientemente: los Entrecanales Franco pondrán fin al pacto parasocial con los Entrecanales Domecq en julio de 2026 y dispondrán libremente de su 29%, aunque por ahora muestran su compromiso con el proyecto de Acciona, así como confianza y apoyo en el equipo gestor. Esto no es baladí, porque se preveía que habría problemas cuando la cuarta generación llegara al mando, pero parece que los habrá también en la última etapa de la tercera.
