En Iberdrola, la sucesión no es un tema importante: es sencillamente crucial. Lo sigue siendo despué de que, hace 13 meses, el presidente, Ignacio S. Galán, nombró a un CEO (Armando Martínez) para contentar a los fondos…, seguir muchos años más y mandando lo mismo como presidente ejecutivo. Sin embargo, ha ocurrido una anécdota que lleva a plantearse una pregunta: ¿seguro que el sucesor se llamará Smith? A ver si va a apellidarse Sánchez-Galán y García-Tabernero.

José Ignacio Sánchez Galán García Tabernero

 

Galán tiene 73 años y el pasado jueves apareció en un acto (sus Premios Globales al Proveedor del Año 2023) con su segundo hijo y el mayor de los varones: José Ignacio Sánchez-Galán García-Tabernero, jefe de Compras Globales de la eléctrica. Y encima, Galán lo hizo justo el mismo día que Pedro Sánchez era reelegido como presidente del Gobierno,… y conviene no olvidar que este último le tiene muchas ganas al presidente de la eléctrica y a la presidenta de Banco Santander, Ana Botín.

No hay que perder de vista que uno de sus hijos ya trabaja en la eléctrica como jefe de Compras Globales y que también lo hace su yerno, David Mesonero, como director de Desarrollo Corporativo

Recuerden que Galán ha repetido en varias ocasiones que su sucesor se apellidará Smith, pues la eléctrica será una compañía más norteamericana que española y esto se reflejó muy bien al anunciar las inversiones del plan estratégico a 2025. Eso sí, no hay que perder de vista que uno de sus hijos ya trabaja en la eléctrica como jefe de Compras Globales y que también lo hace su yerno, David Mesonero, como director de Desarrollo Corporativo, tras haber pasado por Siemens Gamesa (cuando aún era algo española) y PRISA (grupo del que Galán retiró la publicidad de Iberdrola durante una temporada).

 

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Galán tiene cuatro hijos, fruto de su matrimonio con Isabel García-Tabernero: dos mujeres y dos varones. Inmaculada es la mayor, está casada con Mesonero y tienen tres hijos; José Ignacio trabaja como director de Compras Globales de Iberdrola; Teresa es licenciada en ciencias en comercio internacional y trabaja en la firma cosmética Estée Lauder desde hace más de ocho años; y Pablo es ingeniero y trabaja como consultor asociado en Strategy& (que forma parte de la auditora PwC... y que curiosamente fue la que hizo el forensic exculpando a la eléctrica en el caso Villarejo) desde hace nueve meses, tras haber sido consultor de la cadena de suministro del gigante de lujo francés Louis Vuitton y Changing Room, ingeniero interino en Renault y Grupo Antolin (no olviden que su vicepresidenta, María Helena Antolín, es consejera de la eléctrica), e interno de verano en Iberdrola.

En paralelo, Ignacio S. Galán ha sido elegido por la revista Time como uno de los líderes mundiales más innovadores en la lucha contra el cambio climático, al incluirle en el ranking ‘Time100Climate’. Y claro, la eléctrica ha presumido de que bajo su liderazgo “es un ejemplo de anticipación a la transición energética”, con unas inversiones de 150.000 millones de euros en las dos últimas décadas en el desarrollo de las energías renovables y las redes eléctricas, situándose entre las tres más grandes del mundo por capitalización. Eso sí, se les olvida que se trata de una lucha muy rentable gracias a las subvenciones públicas y a las regulaciones, pues Galán lleva años haciendo negocio con las renovables como “producto financiero” y eso que criticaba este aspecto en un principio... allá por el año 2010, y se ha convertido en un especulador verde. Aunque, en esa rentable lucha también hay algunos tropiezos como el que ahora afronta en la eólica marina.