Ignacio Sánchez Galán y Florentino Pérez, los dos espadas de Iberdrola y ACS, empezaron una guerra hace años, pero se parecen en lo que a comunicación e imagen se refiere
En Iberdrola se acercan días clave con el desfile de imputados ante la Audiencia Nacional. Este lunes ha sido el turno del ex director general de negocios y actual consejero externo de la eléctrica, Francisco Martínez Córcoles, y del exjefe del Gabinete de Presidencia, Rafael Orbegozo. El martes 18, será la declaración del expresidente de Iberdrola España, Fernando Becker, y llegará el plato fuerte con la de Ignacio S. Galán, y dos días después, lo hará el representante legal de la filial Iberdrola Renovables Energía. El presidente y CEO de la eléctrica ha cambiado de tercio y ahora ha vuelto a acusar a su gran rival: Florentino Pérez.
Fuentes de la eléctrica han referido que siguen “investigados porque hay una operación en marcha para desestabilizar a la compañía”, según recoge El Mundo. También critican la instrucción del magistrado Manuel García-Castellón, como lenta e insólita, porque les ha sido perjudicial: ha facilitado maniobras de inversores, entre ellos el presidente de ACS y del Real Madrid. Además, les “ha sorprendido que Florentino se haya podido personar como acusación en el caso sin acreditar perjuicio”. Además, Galán ha intentado que la declaración fuera por vía telemática aludiendo ala nueva variante del Covid y la mayor probabilidad de reinfecciones y a que pertenenece a un “grupo de riesgo” (¿será por su edad? Tiene 71 años... y García-Castellón, 70), pero no ha tenido éxito y finalmente tendrá que ir en persona a la Audiencia Nacional.
El ‘caso Villarejo’ y las maniobras de inversores no son los únicos problemas: en los últimos meses ha crecido la presión de los fondos -sobre todo de BlackRock- para que se nombre a un CEO sí o sí
No es la primera vez que Galán se lanza contra su gran rival. Recuerden que hace siete meses Iberdrola ya llevaba dos demandas contra ACS -una incluía a ¡Oh capitán, mi capitán!-, por ninguna de la constructora. Claro que el ‘caso Villarejo’ y las maniobras de inversores no son sus únicos problemas: en los últimos meses ha crecido la presión de los fondos -sobre todo de BlackRock (con lo que Galán se ha dado cuenta que Larry Fink no es un amigo sino un fondo)- para que nombre a un CEO sí o sí.
Y recuerden que el ‘caso Villarejo’ ya le ha empezado a afectar a Iberdrola en lo que a reputación corporativa se refiere: la compra de PNM Resources ha sido rechazada, aunque la eléctrica no se rinde y ha recurrido ante el Tribunal Supremo de Nuevo México. Eso sí, por ahora, se consuela en Reino Unido: ha triunfado en la mayor subasta de eólica marina al hacerse con 7.000 megavatios, lo que supondrá una inversión de 22.500 millones de euros. En concreto, se trata del desarrollo de tres grandes proyectos: dos con tecnología flotante junto a Royal DutchShell (la petrolera anglo-neerlandesa que a partir del próximo día 24 de enero se llamará solo Shell) y otro con estructuras fijas.