El Consejo de Naturgy no acudirá a la opa de IFM, ni tampoco lo harán los consejeros y los directivos a título personal
La noticia (VER DOCUMENTO ADJUNTO) es que el fondo australiano IFM ha decidido seguir adelante con la Opa, decisión tomada apenas 40 horas después de que el Consejo de Ministros explicara sus condiciones, que tantos consideraron que serían suficientes para desalentar a los especuladores.
Pues no, no lo eran. La vicepresidenta Teresa Ribera insiste en que no es un fondo cortoplacista porque gestiona fondos de los trabajadores australianos. ¿Qué tendrá que ver la gimnasia con la magnesia? Como ya advertimos en la otra opa de IFM, esta vez sobre el Aeropuerto de Sidney en Australia, que ellos conocen bien y es su país, saben de la agresividad de IFM. Y es que, coaligado con GIP y CVC, podrían controlar más del 50% de Naturgy e imponer un troceo de la compañía… amén de su ganancia vía dividendos extraordinarios.
Al parecer, las condiciones impuestas por Teresa Ribera a los fondos no eran tan fuertes como aparentaban
Ahora, la esperanza de frenar este movimiento especulativo radica en que Criteria, que rechazó la oferta y ya tiene el 25,997%, siga invirtiendo para controlar la compañía, frente a los tres fondos coaligados. Hasta el 29,9% y cuanto antes mejor. Aún así, deberá enfrentarse a las sumas del 20% del GIP, del 20% de CVC y del aproximadamente otro 20% de IFM. En cualquier caso, más del 51%, para evitar ese troceo. Ojo, y no es que se haya roto la confianza con IFM, que nunca existió: lo que se ha roto es la confianza de Francisco Reynés, presidente de Naturgy, con el líder de CVC y muñidor de la operación, Javier de Jaime.
Lo peor: el mercado sabe ahora que el Gobierno español no protege a sus empresas estratégicas
Al parecer, las condiciones impuestas por Teresa Ribera a los fondos no eran tan fuertes como insistían algunos y la españolidad de Naturgy queda en entredicho. Pero, más que su españolidad, lo que está en peligro es su integridad. Y se trata de una empresa estratégica española.
Lo peor de todo: el mercado ya sabe -o mejor, ha confirmado- que el Ggobierno sociopodemita de Pedro Sánchez no protege a sus empresas estratégicas.