
En nuestro país continúa creciendo el clamor en contra del cierre de las nucleares, a pesar de que el Gobierno prefiere no escucharlo. Este martes 25, se ha sumado la industria auxiliar del sector eléctrico, a través de un manifiesto a favor de la extensión de vida de las centrales, para que no se ponga en peligro el modelo económico de España.
Más de 20 empresas (GD Energy Services -GDES-, EAG (Empresarios Agrupados-Ghesa), Framatome, GE Vernova -que se escindió de General Electric la pasada primavera-, Idom y Westinghouse, entre otras) han firmado el citado manifiesto. El presidente y consejero delegado de GDES, y expresidente de la Sociedad Nuclear Española (SNE), HéctorDominguis, ha referido que así “trasladan la preocupación de las empresas por el futuro energético de nuestro país ante el cierre nuclear” y reivindican que la industria nuclear de España está a la vanguardia.

Dominguis ha señalado que la continuidad nuclear es clave para la garantía de suministro porque “con una pequeña potencia del 6% genera de manera estable el 20% de la electricidad durante más de 8.000 horas al año”. “Algo que ha sido clave en momentos como la Filomena o la DANA, evitando apagones, y que lo será para dar energía a los centros de datos y a la industria intensiva que queremos atraer a España”, ha continuado. Además, la industria auxiliar del sector eléctrico genera 20.000 empleos cualificados y estables de los 30.000 que hay en la industria nuclear española, pero si se cierran las centrales, también “se perdería parte de la capacidad que tenemos de participar en el desarrollo de los reactores modulares más pequeños (los conocidos como SMR), la fusión, la cuarta generación de fisión...”.
La presión fiscal de la nuclear es del 40,7% de los ingresos y paga unos 28 euros por megavatio-hora, mientras en el resto de Europa está en la mitad. Por ejemplo, “la central de Almaraz paga más de 400 millones al año en impuestos, pero se la quiere sustituir por proyectos que por ahora son consumidores de impuestos vía subvenciones. No conviene eliminar contribuyentes netos como son las nucleares”
Asimismo, el adiós nuclear afectaría a la competitividad industrial. Ahora “el precio de la luz es bastante competitivo hoy, donde el 74% de la energía es descarbonizada y el 27,5% es energía de base”. Claro que el cierre nuclear provocará “mayor consumo de gas y aumentará la volatilidad de los precios”, algo que se ha visto en Alemania, y además, subirá un 23% la factura eléctrica para particulares y pymes, y un 35% para la industria, según un estudio de PwC.
Otro aspecto que resultaría perjudicado si cierran las nucleares sería la sostenibilidad ambiental. Dominguis ha señalado que “en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) se dijo desde el origen que el plan era revisable y ahora el panorama es muy distinto al de 2019 y la demanda es mayor a la prevista, además las tensiones geopolíticas hacen necesario que se reduzca la dependencia energética”. “Los objetivos de instalación de bombeo y almacenamiento están lejos de cumplirse”, ha añadido.

Por todo esto, la industria auxiliar del sector eléctrico pide al Gobierno la apertura de un diálogo y la renegociación del acuerdo de 2019 sobre el cierre progresivo de las nucleares. Un diálogo entre las empresas propietarias y el Gobierno, y más después de que algunas de ellas ya se hayan pronunciado públicamente a favor de la extensión de la nuclear, como Endesa e Iberdrola. Asimismo, han referido que la presión fiscal de la nuclear es del 40,7% de los ingresos y paga unos 28 euros por megavatio-hora, mientras en el resto de Europa está en la mitad. Por ejemplo, “la central de Almaraz paga más de 400 millones al año en impuestos, pero se la quiere sustituir por proyectos que por ahora son consumidores de impuestos vía subvenciones. No conviene eliminar contribuyentes netos como son las nucleares”, ha destacado Javier Perea, presidente y consejero delegado de EAG (Empresarios Agrupados-Ghesa). Este último ha defendido la revisión del PNIEC para recoger la extensión nuclear, aunque revisando la fiscalidad para tener rentabilidad. Ahora el Gobierno dice que no hay interés de las eléctricas, pero estas dicen que sí y se quejan de la fiscalidad excesiva, y Perea subraya que “en este juego del ratón y el gato los españoles vamos a acabar pagando el pato”. Y es que no se sustituirán las nucleares por renovables, sino por centrales de gas... y habrá “más emisiones de CO2 y precios finales más altos sin ninguna duda”. Además, ha subrayado que en el tema también debería entrar el planificador del sistema eléctrico (es decir, Redeia).
Por su parte, Ignacio Araluce, ha destacado que “el cierre nuclear no solo afecta a las siete unidades, la estabilidad del sistema eléctrico, la autonomía energética y la lucha contra el cambio climático, sino también a todo un sector. Un sector que es enorme y cuenta con unos 30.000 empleos con un nivel de conocimiento altísimo y de calidad”. El presidente de Foro Nuclear ha afirmado que “el cierre sería un palo tremendo a toda la industria pese a su diversificación y que hay un clamor gigantesco contra el cierre nuclear porque afectaría a la seguridad de suministro y tendría impacto económico en la factura eléctrica que pondría en jaque a las industrias y a los ciudadanos”. Asimismo, ha recordado que es casi el único país que teniendo centrales nucleares va a cerrarlas, mientras en Alemania ya se habla de reabrirlas (lo ha hecho el ganador de las últimas elecciones, Friedrich Merz) e Italia apuesta por la nuclear.
El nuevo canciller de Alemania 🇩🇪, Friedrich Merz, declara que es necesario llegar a una moratoria sobre el desmantelamiento de las centrales nucleares y que la decisión de reiniciarlas o construir nuevas llevará más tiempo. El programa electoral con el que ha ganado las… pic.twitter.com/tElCJPNxoO
— Operador Nuclear (@OperadorNuclear) February 24, 2025
Mientras tanto, en Alemania... pic.twitter.com/74BCExb4xX
— Operador Nuclear (@OperadorNuclear) February 24, 2025
Y al hilo de Almaraz, este martes la ha visitado Isabel Díaz Ayuso, justo un día después de hacer frente común con la presidenta de Extremadura, María Guardiola, y subrayar que “no podemos permitir que el Gobierno apague el futuro de España”. Una central que aporta el 15% de la electricidad de la Comunidad de Madrid.
🔴 La presidenta @IdiazAyuso ha visitado con @MGuardiolaM la central nuclear de Almaraz, en Extremadura.
— Comunidad de Madrid (@ComunidadMadrid) February 25, 2025
👉 Han reclamado la prolongación de la vida útil de esta infraestructura, ante la decisión del Gobierno central de apagarla en 2027.
+Info: https://t.co/Wj4Z2tIQHFpic.twitter.com/3urYJO2vDK
Europa y el resto del mundo apuestan por la energía nuclear como fuente para la industria, las facturas de familias (4 millones sólo de Almaraz) y las empresas o centros de datos.
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) February 25, 2025
Bélgica, Francia o la propia ministra Ribera no dudan (hoy) en hacerlo.
Nos va en ello la… pic.twitter.com/UdQh4WNtzR