José MIguel Contreras, en un nuevo triple salto mortal... pero con red
José Miguel Contreras quiere ser el único español que haya fundado dos teles. Socialistas las dos, por supuesto. Primero fue La Sexta, creada con dineros varios, de Mediapro de Jaume Roures, que sigue siendo un buen amigo de Telefónica y, naturalmente, dinero público y parapúblico. Ahora, quiere crear una nueva Sexta (¿Por qué no 'La Séptima', aunque ese nombre tiene problema de registro?), si cabe aún más progresista que el canal de Antonio Ferreras, Ana Pastor y compañía.
Contreras quiere crear la nueva cadena desde su puesto actual de supervisor sanchista del Grupo PRISA. Ahora bien, resulta que PRISA está en quiebra técnica y un canal de TV en abierto, especialmente si es a mayor gloria de un político, Pedro Sánchez, precisa mucho dinero. Pues bien, Contreras pretende obtener el dinero necesario para esa televisión... en Telefónica.
No, no creo que se le pueda calificar como ideólogo de El País, la SER y cía, porque la directora del periódico, Pepa Bueno, no está dispuesta a obedecerle, como obedecía al fallecido Miguel Barroso, pero nadie le puede negar el papel de supervisor de los medios directamente monclovitas. O, si lo prefieren, Sánchez le permite que juegue ese papel. En cualquier caso, como ya hemos explicado en Hispanidad, Contreras es el hombre de Moncloa para RTVE, PRISA y para la imagen televisiva, la más cuidada, del presidente del Gobierno. Ese papel nadie se lo puede negar, sólo Sánchez... y por ahora no lo ha hecho.
Crear una televisión en abierto a partir de la biblioteca de Movistar+ es un objetivo complicadito pero que mantiene la esencia Contreras: funcionar con el dinero de los demás, en beneficio propio y a mayor gloria del poder
Tampoco es Josemi Contreras un genio de la gestión televisiva. Su obra, la Coproductora, sólo ha sobrevivido gracias a su capacidad para dar sablazos a empresas y a otras cadenas, especialmente a aquella en la que más influye: la pública RTVE.
Además, ahora, con 'La Séptima' -insisto que es un nombre que a Contreras le gusta, pero que no posee- Josemi pretende el más difícil todavía: crear una tele desde PRISA pagando Telefónica, con una no muy sutil idea de mezclar una nueva TV en abierto con el depósito y la biblioteca de Movistar+. Un objetivo complicadito pero que mantiene la esencia Contreras: funcionar con el dinero de los demás, en beneficio propio y a mayor gloria del poder. Y las esencias, no lo olviden, son muy importantes.
Empresarialmente es una locura e ideológicamente un peligro. Sobre todo por la primera, a Marc Murtra no le seduce en absoluto que Telefónica vuelva a meterse en el proceloso, y ruinoso, mundo de la tele en abierto. Un mundo donde malviven una telepúbica derrochona, con el dinero de los demás, unas autonómicas que viven de sus gobiernos, una Mediaset al borde del abismo, canales de pago multinacionales dedicados exclusivamente a la ficción, donde sólo es rentable una Atresmedia bipolar, con un canal progre derechas y otro rabiosamente progre de izquierdas (como ambos son progresistas no se puede hablar de esquizofrenia sino de simple bipolaridad)...
Por eso, el nuevo presidente de Telefónica, Marc Murtra pide árnica: primero, que le dejen poner orden en la operadora sin incurrir en más gatos espurios. Josemi: no te aceleres. Marc Murtra no quiere repetir la odisea de Vía Digital.
No me extraña.