
Este jueves, en la Junta de Accionistas de Enagás ha habido pocas sorpresas... El CEO, Arturo Gonzalo, ha insistido en la ruina del transporte del hidrógeno verde (algo que aún no es rentable y en cualquier caso es mucho peor que la actividad de producirlo al lado de donde se va a consumir), pese a las dudas que han dejado ver varios accionistas en el turno de preguntas. Eso sí, mucho más comedido ha estado el presidente no ejecutivo, Antonio Llardén, que ha referido que “el hidrógeno verde va a jugar un papel clave, fundamental para que la industria y el transporte (el pesado, el ferroviario, el marítimo y el aéreo) se descarbonicen”.
El CEO ha subrayado que en el tema del hidrógeno renovable, “España está ejerciendo un claro liderazgo, con el impulso del Gobierno y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico” y que “Enagás es un actor clave en este desarrollo”. Un curioso peloteo si se tiene en cuenta que el Ejecutivo sólo es dueño del 5% del capital y que su amiga Teresa Ribera ya no está al frente de dicho Departamento (donde él no logró sucederla y lo hizo Sara Aagesen) sino que es vicepresidenta europea. Claro que tampoco sorprende, porque Gonzalo permanece al 111% alineado con la política energética del Sanchismo y no sólo ha destacado que Pedro Sánchez estuvo presente en el tercer Día del Hidrógeno de la compañía, sino que ambos visitaron la planta de fabricación de electrolizadores de Accelera By Cummins en Guadalajara.
Ante las preguntas de los accionistas, Gonzalo ha señalado que el hidrógeno verde “no es que vaya a ocurrir, es que está ocurriendo” y ha vuelto a presumir de proyectos como la Red Troncal del Hidrógeno y el famoso hidroducto H2Med, de los que hace unos meses apuntó que serán “realidad” en 2030 y ahora ha referido que ya están recibiendo dinero de fondos europeos... Por ejemplo, se han adjudicado el 100% de los fondos europeos CEF (siglas en inglés del Mecanismo Conectar Europa, creado para acelerar la inversión en las redes transeuropeas) para la fase de estudios solicitados, en concreto 40,2 millones para la citada Red y 35,5 millones para el H2Med, y este último ha recibido casi el 40% de los fondos concedidos por la Agencia Ejecutiva Europea de Clima, Infraestructuras y Medio Ambiente (CINEA) a proyectos de infraestructuras. Además, ha referido que el Gobierno ha adjudicado 1.214 millones a siete proyectos del programa de los Valles deHidrógeno.
Enagás invertirá 3.125 millones de euros en infraestructuras de hidrógeno, como parte de un plan inversor de 4.035 millones hasta 2030. Eso sí, confían en que los ingresos, que llevan tiempo moviéndose a la baja, repunten para 2027 con el nuevo marco retributivo

El CEO de Enagás no se ha olvidado de hacer algún anuncio: la próxima semana se iniciará “el mayor plan, el Plan Conceptual de Participación Pública de la Red Española del Hidrógeno”. Este último se desarrollará en 2025 y 2026, abarca 13 comunidades autónomas y más de 500 municipios, pero la compañía transportista de gas y gestora del sistema gasista español tomará su “decisión final de inversión en 2027”. Curioso, mejor jugarse el dinero de los fondos europeos que el de los accionistas, pues hay muchas dudas alrededor del hidrógeno verde. Eso sí, Gonzalo ha afirmado que Enagás invertirá 3.125 millones de euros en infraestructuras de hidrógeno, como parte de un plan inversor de 4.035 millones hasta 2030: los primeros ejes de la Red Troncal Española de Hidrógeno supondrán una inversión neta de 2.645 millones y el corredor H2Med, de 481 millones. Mientras, confían en que los ingresos, que llevan tiempo moviéndose a la baja, repunten para 2027 con el nuevo marco retributivo. Veremos.
Llardén ha subrayado que en el último año, la cifra de accionistas minoristas ha crecido en unos 5.000, hasta “casi 95.000”, cifra que Gonzalo ha especificado minutos después, situándola en 95.267. El presidente no ejecutivo también ha citado “a los accionistas institucionales, algún family office (en clara alusión a Pontegadea, el vehículo inversor de Amancio Ortega) y al dominical SEPI (o sea, el Estado), que con su apoyo y consejo hace que Enagás funcione muy bien”. Por su parte, Gonzalo ha añadido al final de su discurso que otros vectores importantes de crecimiento que tendrá Enagás se verán a través de su filial Scale Green Energy (en ámbitos como el CO2, el bunkering (suministro de combustible a buques) de GNL y BioGNL, hidrógeno renovable para la movilidad y amoniaco verde), pero no ha dicho nada del biometano... Además, ha querido dejar claro que la prioridad es el hidrógeno verde y que “autonomía estratégica y descarbonización son dos caras de la misma moneda. Lo conseguido con la red gasista lo vamos a hacer también con la del hidrógeno verde”.
Todos los acuerdos propuestos han sido aprobados, entre ellos el nombramiento como consejera independiente de Elena Massot Puey, en sustitución de Natalia Fabra, quien manifestó su voluntad, por razones profesionales, de no volver a ser reelegida. Con este nombramiento, el Consejo de Administración de Enagás se politiza aún más porque Massot es cercana a Junts y en este órgano tienen silla desde hace tiempo: la exministra pepera Ana Palacio, los exministros socialistas José Blanco (más conocido como ‘Pepiño’) y José Montilla; y el que fuera asesor podemita Cristóbal José Gallego. Tampoco hay que olvidar que el socialista Llardén (74 años) se ha mantenido como presidente desde 2007, cuando gobernaba José Luis Rodríguez Zapatero; y, aunque perdió funciones ejecutivas con el nombramiento de Gonzalo como CEO, ha permanecido en la compañía. Massot Puey es licenciada en Administración y Dirección de Empresas, así como en Derecho, y es CEO de Vertix Grupo Inmobiliario, compañía que creó su padre, Felipe Massot.
Y un acuerdo propuesto y aceptado que ha resultado llamativo ha sido el cambio de auditor: Deloitte ha sido elegido para sustituir a EY.