José Bogas tiene muy claro que hay que invertir en redes sí o sí, pero Teresa Ribera parece que no tanto
Este miércoles, se ha celebrado la Junta de Accionistas de Endesa, con un quórum del 83,694% del capital con derecho a voto, y se han aprobado todos los acuerdos previstos. Sin duda lo más interesante ha estado en el discurso del CEO, el ingeniero José Bogas, que ha advertido que es “crítico” y “urgente” invertir en redes... o será imposible la transición energética.
Un auténtico llamamiento al Gobierno y en especial, a la vicepresidenta ecológica, Teresa Ribera, aunque lo más probable es que no lo haya escuchado porque se ha producido el mismo día que se ha conocido que liderará la lista del PSOE a las elecciones europeas. El tema de la inversión en redes preocupa -y mucho- dentro del sector energético, y esta vez, lo ha reflejado Bogas, al afirmar que “invertir en redes es clave para dotarlas de resiliencia y nuevas capacidades digitales; es crítico para que puedan dar cobertura a un modelo de generación y de consumo eléctrico distribuido”, y que “es importante que la regulación se adapte a esta necesidad”.
Bogas considera que la inversión en redes es “urgente” porque “la actual regulación en materia de distribución nos está haciendo perder oportunidades a nivel país para atraer empresas, talento y tejido industrial
Bogas ha subrayado que Endesa “tiene capacidad para incrementar la inversión, de acuerdo a como se contempla en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), pero es necesario que la regulación mejore”. En concreto, “que se eliminen los topes a la inversión (ahora es del 0,13% para las distribuidoras -supone 2.000 millones- y del 0,065% del PIB para las redes de transporte -algo menos de 1.000 millones-) y que la remuneración sea adecuada para que la inversión tenga una rentabilidad razonable”. Asimismo, el tema es “urgente” porque “la actual regulación en materia de distribución nos está haciendo perder oportunidades a nivel país para atraer empresas, talento y tejido industrial”. Esto último se está viendo, por ejemplo, en los centros de procesamiento de datos (por los que apuestan Merlin Properties y ahora también ACS e Iberdrola, entre otras empresas) que en Irlanda tienen un consumo cercano al 20% de la demanda, mientras en España solamente representan un 0,2%. Por ahora, Ribera sólo ha abierto la puerta a elevar dichos topes, pero no a quitarlos, y aún no hay una decisión tomada.
El CEO de la energética controlada en un 70% por la italiana Enel ha anunciado que tendrán un socio en algún proyecto renovable, algo que ya están haciendo Repsol e Iberdrola. Sobre la apuesta por la descarbonización, que empezó hace diez años en la Junta de Accionistas de 2014, incluso antes de la COP21 de París celebrada en 2015, Bogas ha subrayado que “Endesa hace lo que dice” y que “hemos cruzado el Cabo de Hornos en nuestra travesía hacia la descarbonización y la electrificación, pero aún tenemos travesía por delante”. Considera que el modelo energético es, sobre todo, eléctrico, y “debe ser competitivo para los consumidores y rentable para el inversor”, subrayando el tema de la sostenibilidad financiera y medio ambiental, esto último recuerda al giro que ha dado BlackRock y otros fondos de inversión (Pimco y JP Morgan) recordando que la economía debe ir antes que la ecología... y ojo, porque ahora Europa ha puesto por delante la seguridad y la defensa antes que todo lo verde. Además, el impuestazo energético tampoco ayuda a la hora de las inversiones, como ha recordado, pero por ahora solo se ha prorrogado y sigue sin haber incentivos para las empreas que inviertan.
El CEO de Endesa pide “que se eliminen los topes a la inversión y que la remuneración sea adecuada para que la inversión tenga una rentabilidad razonable”
Bogas también ha referido “la creciente oposición y la judicialización de la ejecución de numerosos proyectos” de renovables (sobre todo eólicos), subrayando que “es necesario otorgar seguridad jurídica a las inversiones para avanzar en la descarbonización”. Más deberes para el Gobierno y a la lista de tareas se suma el tema de que “es necesario actualizar la regulación, mejorarla y agilizar los trámites” en la generación regulada de los sistemas no peninsulares, donde desde 2013 no se ha lanzado ningún proceso de concurrencia de nueva capacidad. Asimismo, Endesa prevé salir completamente del carbón en 2027, pues aún hoy conserva una mínima actividad de generación con este combustible fósil en Alcudia (Baleares) por razones de seguridad de suministro; y también estima una recuperación de los márgenes en el negocio del gas, pero un descenso del uso de este para producir luz.
El CEO de Endesa ha subrayado que el próximo noviembre la energética cumple 80 años y que son un actor clave para la transición energética, entre otras cosas, porque “contribuye al diálogo sosegado y constructivo para que la colaboración público-privada sea una realidad”, algo que teniendo en cuenta el enfrentamiento entre Iberdrola (con el apoyo de Ribera) y Repsol no es baladí. Por su parte, el presidente no ejecutivo de Endesa, Juan Sánchez-Calero, ha destacado que “la transición energética es un desafío que nos obliga a renunciar a partes importantes de nuestro pasado”, al tiempo que se necesitan inversiones “en un marco regulatorio estable”, y sin olvidar el dividendo (1.059 millones con cargo al último ejercicio y de los que el 70% van para Enel).
Ante las negociaciones del VI convenio, Bogas destaca que la compañía tiene unos “salarios en la media o por encima de la media del sector energético y que está entre las diez empresas del Ibex que mejor remuneran a sus empleados
Sólo han intervenido tres accionistas (uno de ellos quejándose de la depreciación de la acción) y la mayoría de las respuestas han corrido a cargo de Bogas. Entre otras cosas, ha confirmado que tendrán algún socio en algún proyecto renovable y que no tienen previsto ninguna recompra de acciones. Sobre la pérdida del contrato de la Junta de Andalucía la contestación ha sido que han ganado el de la Comunidad Valenciana, que tradicionalmente se solía adjudicar Iberdrola. Además, ante las negociaciones del VI convenio, se ha destacado que la compañía tiene unos “salarios en la media o por encima de la media del sector energético y que está entre las diez empresas del Ibex que mejor remuneran a sus empleados”.
Los accionistas han aprobado todos los acuerdos propuestos, entre ellos, varios nombramientos de consejeros (incluido el del CEO de Enel y vicepresidente de Endesa, Flavio Cattaneo), así como elevar el número de miembros del Consejo a 14. Ha salido Alicia Koplowitz, también se ha equilibrado el porcentaje de representación de Enel (hasta ahora sólo tenía el 33% de los consejeros) y se continúa con un número de independientes superior al de dominicales (50% frente a un 42,9%, y un 7,1% de ejecutivos). Entre los dominicales, se han ratificado los nombramientos de Flavio Cattaneo, Stefano de Angelis (director de Administración, Finanzas y Control de Enel) y Gianni Vittorio Armani (director de Enel Grids e Innovability); se han aprobado los nombramientos de Elisabetta Colacchia y Michela Mossini. Y entre los independientes, se ha reelegido a Eugenia Bieto Caubet y Pilar González de Frutos; y se ha nombrado Guillermo Alonso Olarra.
