El empresario italiano Luca de Meo ha intervenido por videoconferencia en el IV Foro Anfac y tiene bastante claro que “mientras Europa baila el chachachá, el mundo no se anda con chiquitas”. En concreto, el CEO de Renault y presidente de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA) -que agrupa a 15 fabricantes de vehículos presentes en Europa- se ha referido a lo que están haciendo EEUU (“incentivando su industria con la ley IRA”) y China (“planificación a largo plazo”), mientras aquí en Europa “regulan como locos y no de forma muy coherente”.

De Meo ha señalado que también se está produciendo “una inversión del control geopolítico”. Y es que el motor de combustión actuó como barrera de entrada en Europa, pero ahora esta es débil ante China, que controla la mayor parte de la extracción y el refinado de las materias primas del coche eléctrico, y ve clave que haya una diplomacia de la cadena de valor que abarque la extracción, el refinado, los semiconductores y la soberanía de la nube, entre otros aspectos. De hecho, ya hay varios fabricantes automovilísticos que han advertido de la falta de barreras ante las marcas del gigante asiático, como Elon Musk (Tesla) o Carlos Tavares (Stellantis).

De Meo destaca que mientras en EEUU están “incentivando su industria con la ley IRA” y en China haciendo “planificación a largo plazo”, en Europa “regulan como locos y no de forma muy coherente

Al hilo de las diferentes formas de actuación, Wayne Griffiths, CEO de Seat y Cupra, y presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), ha referido que “mientras en Europa se ha optado por obligaciones y multas, en EEUU y China se está incentivando la industria del automóvil”. Pero el sector “necesita respuesta europea a EEUU y China”. Francisco José Riberas, presidente de Gestamp y de Sernauto (asociación que agrupa a los fabricantes de componentes automovilísticos), ha subrayado que “EEUU ha sacado el bazuca con el tema de la ley IRA, mientras en Europa hemos sido más prudentes” y además “ha ido por la vía de imponer normas, límites y sanciones”. Y José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona y de Acciona Energía, ha pedido “hagamos un IRA europeo de verdad”.

Tras el aviso dado por el sector del automóvil de que o se dan ayudas eficaces o no habrá coche eléctrico en España, De Meo ha hablado más en términos del viejo continente, donde dicho sector tira del resto. De Meo ha subrayado que “la industria del automóvil es un sector que soporta la economía de Europa”, pero “si se saca de la ecuación, habrá déficit comercial estructural”. “Está en juego el 8% del PIB de la UE, el 30% del gasto en I+D y 13 millones de empleos”, ha añadido.

Para Riberas“EEUU ha sacado el bazuca con el tema de la ley IRA, mientras en Europa hemos sido más prudentes” y además “ha ido por la vía de imponer normas, límites y sanciones

El CEO de Renault y presidente de ACEA no sólo apuesta por la electrificación para reducir el impacto medioambiental, sino también por la revolución digital (donde el valor del software que lleva un vehículo se ha duplicado), así como por la combinación de seguridad y eficiencia energética. De Meo ha referido que “hace más de un siglo bastaba jugar a un deporte (el motor de combustión), pero ahora hay que jugar a muchos a la vez (eléctricos e híbridos, software, servicios conectados y economía circular) y para cada uno hay que crear la cadena de valor. Todo ello en “un nuevo terreno de juego marcado por la volatilidad en la tecnología, debido fundamentalmente a las baterías y al precio de las materias primas (por ejemplo, el precio del litio se multiplicó por 12 y luego se dividió entre dos en solo dos años). Y considera que se debe jugar en equipo: fabricantes, políticos, ciudadanos y trabajadores.

De cara a las previsiones para 2024, De Meo cree que tanto en España como en el resto de Europa el mercado de automóviles va a ser bastante estable, lo que es una buena noticia. En nuestro país, estamos lejos de los niveles tradicionales previos a la crisis del Covid (entre un 20% y un 25% por debajo aún) y con niveles de ventas de eléctrícos preocupantes. En Alemania se ha visto el efecto de quitar la subvención a este tipo de coches: han bajado las ventas. Y en plan políticamente incorrecto, el italiano ha concluido: “La transición al eléctrico la van a tener que pagar los que tienen pasta, los ricos, porque cuestan más... y hay riesgo de especulación”.