Marc Murtra tenía que dar un golpe de timón para demostrar que no ha venido a Telefónica a administrar una herencia sino a gestionar un empresa. Así, con apenas un mes en la Presidencia ha vendido Telefónica Argentina a la operadora argentina Telecom (VER DOCUMENTO ADJUNTO), participada por el periódico Clarín (El País argentino, para entendernos) y por el opaco financiero mexicano David Martínez, que merece capítulo aparte.

El precio ha sido de 1.189 millones de euros, al cambio actual, por encima de lo previsto por los analistas, con un vendedor al que el activo le quemaba en las manos y un comprador que a pesar de pujar alto (Carlos Slim se ha quedado fuera por rata) sabe que Argentina está al alza con la llegada de Milei a la Casa Rosada, como sabe que su moneda está dejando de ser una rémora, porque ahora el peso es un divisa respetada en los mercados internacionales. La economía argentina, en suma, camina hacia arriba con Milei, de la misma forma que caminaba hacia abajo con los peronistas.

Sí, a lo mejor no era Telefónica Argentina lo que había que vender. En cualquier caso, el precio es bueno por lo que se ha superado la rémora que la misma Telefónica se había autoimpuesto: no se dice lo que se va a vender porque se deprecia el activo.

Con ello, Argentina Telecom tendrá una cuota de mercado en el país austral del 70%.

Justo cuando Argentina mejora, la teleco española vende... y seguirá vendiendo en toda Hispanoamérica: Mexico, Perú (en suspensión de pagos)... sólo quedará Brasil

Esto quiere decir dos cosas: que la Telefónica de Marc Murtra, proceso ya iniciado por Pallete, se aleja de su mercado natural, Hispanoamérica. También quiere decir que la nueva Telefónica semi-nacionalizada no se expande sino que se contrae.

Aspectos importantes de la operación. Mucha atención a David Martínez, el inversor mexicano de Fintech Advisory. Reside en Nueva York, donde gestiona, no sólo su fortuna, sino también la de otros adinerados compatriotas.

Posee una valiosa colección de arte, es el mayor accionista de Argentina Telecom, primer accionista individual del Sabadell (3,5 o 5%, según se mire), precisamente el personaje que rompió la unanimidad del Consejo de Pep Oliu en la OPA del BBVA y el que más próximo se ha mostrado a estudiar la oferta de Carlos Torres, aunque la califica de insuficiente.

A Milei no le gusta la operación: ahora tiene una operadora Telecom, que controla el 70% del mercado argentino... y cuyos dueños son muy críticos con la Casa Rosada. Y por esa misma razón, a Sánchez, 'propietario' del 10% de Telefónica, le encanta el movimiento

Pero no lo duden. Si la opa del BBVA sobre el Sabadell triunfa, y conste que no es una buena operación para España, será gracias al mexicano David Martínez.   

Martínez es un personaje obsesionado con su imagen: cuando llegó al Sabadell se negó a entregar una foto para publicarla en la web.

También cuida sus inversiones en su país de origen y le gustan los medios de comunicación. Así, es socio de Clarín en Argentina y de los Azcárraga en la Televisa mexicana, a la vez que consejero de importantes corporaciones mexicanas, como Cemex, la multinacional cementera.

Es el poseedor del 29% del comprador de Telefónica Argentina y, ojo, uno de los inversores hispanos más opacos. Financiero, no gestor, pero financiero activista, extraordinariamente persistente en sus opiniones, expresadas siempre a través de los consejos... si lo sabrán Pep Oliu y González-Bueno.

En resumen, justo cuando Argentina mejora, la teleco española vende... y seguirá vendiendo en en toda Hispanoamérica: Mexico, Perú (en suspensión de pagos)... sólo quedará Brasil, que es Hispanoamérica, no iberoamérica. Además, sí, Telefónica Brasil marcha bien pero ojo, el real brasileño va a peor, mientras el peso argentino va a mejor. Milei gusta mucho más que Lula a los mercados de Divisas.

En Moncloa gusta la operación porque supone un golpe para Milei es su propio terreno: el del liberalismo económico, que le obliga a no oponerse a operaciones empresariales, salvo por razones anti-monopolio... aunque éste sea el caso

Hablando de Javier Milei, al presidente argentino no le gusta la operación: ahora tiene una operadora Telecom, que controla el 70% del mercado argentino... y cuyo dueño es un periódico crítico con el Gobierno. Y por esa misma razón, a Pedro Sánchez, 'propietario' del 10% de Telefónica, le encanta el movimiento.

Sí, en Moncloa gusta la operación porque supone un golpe para Milei es su propio terreno: el del liberalismo económico, que le obliga a no oponerse a ninguna operación empresarial, salvo por razones anti-monopolio... como es el caso.

Ahora tendrán que actuar las autoridades de competencia argentinas pero Marc Murtra confía en que eso afecte al comprador, no al vendedor.

Mientras tanto, eso sí, los cambios en el organigrama directivo de Telefónica continúan pendientes, pero esta operación le da un respiro al asediado nuevo presidente de Telefónica.

Estamos ante una operación de luces a corto y sombras a largo.