Iberdrola ha publicado en la mañana de este miércoles sus resultados del primer semestre y sigue trayendo buenas noticias en general, aunque no en las cifras de España. El beneficio neto obtenido hasta junio ha sido superior en un 35,5% al de hace un año, pasando de 1.531 millones de euros (M€) a 2.075M€. Una evolución positiva considerable que no ha pasado desapercibida para el mercado. Ante un aumento intradía de la cotización del Ibex 35 de un 0,23% en el momento de la realización de este artículo, el precio de la acción de Iberdrola subía un 0,99%, a 10,17 euros (€), aunque había empezado la sesión con alzas superiores al 1%. 

Sin más dilación, vayamos con el estudio de las principales cifras que componen la cuenta de resultados de la eléctrica que tiene como presidente y CEO a Ignacio S. Galán, quien a sus 71 años continúa resistiendo la presión de los fondos de inversión (especialmente de BlackRock) para que nombre a un CEO.

Si entre enero y marzo, el beneficio neto en España cayó un 29%, hasta los 337M€, en el conjunto del primer semestre, cae un 26%, a 822M€, por los altos precios de la energía, y supone un 39,6% de la ganancia total del grupo 

Como ya se vio en el primer trimestre, la eléctrica tiene un problema en España, donde le va mucho peor que en el extranjero. Si entre enero y marzo, su beneficio neto cayó un 29%, hasta los 337M€, representando menos de un tercio del resultado total, ahora, en el conjunto del primer semestre, ha caído un 26%, a 822M€, representando un 39,6% de la ganancia total. ¿El motivo? “Los altos precios de la energía que no se han traspasado a los clientes con contratos a precio fijo acordados previamente”. Ante el nuevo impuesto a las energéticas que planea el Gobierno Sánchez, con el que Galán mantiene su enfrentamiento incluso llegando a aludir inseguridad jurídica, la eléctrica destaca en su comunicado que “es una de las empresas más comprometidas con las arcas públicas. En el 2021 aportó 7.836M€ a nivel global, un 5% más que el año anterior, es decir, 361M€. Cerca de la mitad de este importe, 3.469M€, corresponde a España”. Y en la presentación ante analistas, el propio Galán ha defendido que las eléctricas “no tienen beneficios extraordinarios”, y ha subrayado que el 63% de la energía que se consume es gas y petróleo y que “hasta donde yo sé, las compañías energéticas que están aumentando sus beneficios en Europa son las gasistas y las petroleras, no las eléctricas integradas”.

Por cierto, ya saben que a Galán le gusta mucho presumir de ‘verde’, pero la producción en España ha vuelto a mostrar que no lo es tanto en realidad y ha bajado un 12,6%, a 27.467 gigavatios hora (GWh). La de renovables se ha hundido un 28%, a 11.870 GWh (incluyendo un 3,8% menos de eólica terrestre, un 51,2% menos de hidráulica y un 41,2% menos de minihidráulica, que no ha podido compensar el aumento del 125,6% de solar fotovoltaica); la nuclear ha descendido un 0,6%, a 11.505 GWh; la de cogeneración ha subido un 2,1%, a 1.165 GWh; y la de ciclos combinados ha crecido un 31,6%, a 2.928 GWh. Eso sí, Galán espera una “normalización” de la producción en el segundo semestre con la recuperación de la planta nuclear de Cofrentes y un previsible mejor comportamiento de la hidráulica.

producción de Iberdrola en España en el primer semestre de 2022º

Respecto al nuevo impuesto a las energéticas, la eléctrica destaca que “es una de las empresas más comprometidas con las arcas públicas: en 2021 aportó 7.836M€ a nivel global y cerca de la mitad (3.469M€) en España”

La facturación total del grupo, ingresos, a cierre de primer semestre, se ha incrementado un 30,3%, pasando de 18.752M€ a 24.430M€. De igual manera, también ha crecido el margen bruto, aunque en un porcentaje menor (en un 16%), lo que nos indica que Iberdrola ha asumido mayores gastos de explotación que hace un año, aunque en España dicho margen ha caído un 21,3%, a 788M€, “debido a un extraordinario relacionado con una decisión judicial y una orden regulatoria sobre determinados activos (-195M€) y a reliquidaciones positivas de años anteriores contabilizadas en el primer semestre de 2021 (-22M€)”. El gasto operativo neto total de la eléctrica ha ascendido un 17,6%, pasando de 2.120M€ a 2.492M€.

Vayamos ahora con la capacidad de generar recursos del grupo, medida a través del indicador Ebitda. La cifra de Ebitda de la eléctrica ha subido un 18,4%, pasando de 5.444M€ a 6.444M€. Es decir, el grupo ha generado mayores recursos que en el primer semestre de 2021, si bien como hemos mencionado, venía de obtener unos ingresos superiores en un 30,3%, evidenciándose así que el gasto del grupo se ha incrementado considerablemente entre períodos. Eso sí, el Ebitda ha mejorado en todas sus geografías excepto en España, donde debido a un entorno adverso ha caído un 18,6%.

Ante los analistas, Galán ha defendido que las eléctricas “no tienen beneficios extraordinarios”, y que “hasta donde yo sé, las compañías energéticas que están aumentando sus beneficios en Europa son las gasistas y las petroleras, no las eléctricas integradas”

De igual manera, nos ha parecido relevante incluir de nuevo en el análisis de resultados, las acciones emprendidas por Iberdrola dentro de su estrategia de expansión iniciada a comienzos de 2021. La cifra de inversión bruta acumulada en los últimos doce meses ha sido de aproximadamente 10.200M€, 4.741M€ (+5%). De manera destacada, además de España (casi 1.100M€), el grupo está invirtiendo en las zonas geográficas de Estados Unidos (1.246M€), como hemos visto en su reciente encuentro con Joe Biden, y Brasil (837M€). Respecto al importe de la inversión en los distintos negocios, parecen relevantes las cifras de 2.323M€ y 1.848,99M€ en renovables y redes, respectivamente. Todo ello, como veremos, en un escenario de incremento de la deuda del grupo, es decir, que necesita de financiación externa para acometer el total de sus inversiones. Galán ha destacado que “desde Iberdrola seguimos incrementando nuestras inversiones para reforzar la autonomía energética y acelerar la transición verde, disminuyendo la dependencia de los combustibles fósiles. Los proyectos que tenemos en marcha en España y en todo el mundo nos están permitiendo generar actividad económica y sostener 400.000 puestos de trabajo en más de 19.000 proveedores”.

En el primer semestre, la deuda neta ajustada de Iberdrola ha crecido hasta los 41.717M€ (1.863M€ provocados por el tipo de cambio), siendo superior en 2.598M€ a la cifra a cierre del año 2021. Hasta aquí las malas noticias respecto a la deuda del grupo, comencemos con las ‘buenas’: ha descendido el coste medio de su deuda en 4 puntos básicos, hasta el tipo del 2,86%, que tiene su mérito en un entorno de subida de tipos de interés. Asimismo, ante la incertidumbre que cada día es más certidumbre de subida de tipos de interés en los mercados, el grupo tiene el 75% de su deuda está a tipo de interés fijo, un bálsamo bastante importante, ya que de lo contrario, estaría referenciada a tipo variable y vería incrementados sus tipos de interés período de liquidación tras período. Además, el grupo sigue mejorando su ratio deuda neta ajustada/Ebitda, que ha pasado de 3,4x a 3,2x, es decir, ha mejorado la capacidad de generar recursos respecto a su deuda.

La deuda neta ajustada ha crecido hasta 41.717M€, pero ha descendido su coste medio en 4 puntos básicos, hasta el tipo del 2,86%, que tiene su mérito en un entorno de subida de tipos de interés. Además, el 75% de su deuda está a tipo de interés fijo

Finalmente, toca tratar la liquidez, que cierre del primer semestre se ha situado en 25.000M€, manteniendo así una posición sólida de liquidez. Una liquidez que, atendiendo a que la vida media de la deuda del grupo se mantiene en 6 años, no parece que tendrá problemas para devolver en el período pactado.

Como conclusión, Iberdrola está mejorando sus cifras de resultados, aunque no así las de deuda ni tampoco la de beneficio neto en España, si bien su posición sólida de liquidez y que la misma esté referenciada en su mayor cuantía a tipo fijo indican que no parece que vaya a tener problemas para afrontarla a vencimiento. Y de cara a la segunda mitad del año, reafirma sus previsiones de lograr un beneficio neto global de entre 4.000M€ y 4.200M€, pero no dice nada de lo que espera en España, donde su filial ya no está dirigida por Ángeles Santamaría, sino por el chile Mario Ruiz-Tagle. 

Iberdrola, seguimos echando en falta para un análisis de tu estructura de liquidez una publicación de tu estado de flujos de efectivo, no sabemos por qué no lo publicas, pero un grupo de tu magnitud debería publicarlo periódicamente.