Marco Patuano vuelve al hogar, a Cellnex, pero está vez como primer ejecutivo, para sustituir al CEO, Tobías Martínez, el hombre que ha forjado la empresa de redes de Telecomunicaciones y que se marcha el 4 de junio, ligeramente harto de la presión de los fondos, de los de dentro y de los que amenazaban con entrar. En especial, TCI otro fondo activista metomentodo que está convirtiendo a Cellnex en otra empresa... víctima de los fondos. No nos engañemos: los fondos quieren que Cellnex empieza a dividendar o que siga subiendo en bolsa indefinidamente. Y ahora que los tipos suben, para subir en bolsa necesita librarse de deuda. Pero si amortiza deuda no podrá invertir. Total, Tobías, has hecho un milagro pero ahora volvemos a lo ordinario, así que nos sobras. Y a ver qué pasa con su equipo, español, rodeado de fondos extranjeros a los que les importa un bledo un país ubicado al norte de Gibraltar.

Patuano es una italiano al que le gusta España y habla correctamente el español, pero no tiene más tendencia a operar que a gestionar. Sí, también ha gestionado, pero le emociona el M&A, las fusiones y adquisiciones. Nada que ver con Tobías Martínez, que es el verdadero creador del milagro Cellnex.

Martínez ha conseguido en 8 años introducir a Cellnex entre los grandes de Europa en torres de comunicación. No reparte apenas dividendos porque ha utilizado el criterio norteamericano de endeudarse para invertir y creer con gran rapidez. Y le ha salido bien aunque las oportunidades de crecimiento en Europa son menores. En cualquier caso, Tobías no se hubiera marchado si los fondos no le hubieran hecho la vida imposible. 

A partir de ahí, comienza la etapa Patuano, en nombre del grupo Benetton. La sospecha es que se impongan las tesis de los fondos para los que el modelo de Tobías ha tocado techo y ahora hay que trocear la compañía o fusionarla. Ahora bien, si la fusionan con la empresa líder, American Towers, que estaría deseosa de comprarla, cuidado, porque los reguladores podrían hablar de monopolio. Y entonces...