Puente insiste en que el tren “vive el mejor momento”; y en Talgo, cada día está más cerca la entrada de polacos e indios / Foto: Pablo Moreno
Llegan nuevas muestras del ‘desastre Puente’. El ministro Óscar Puente insiste en que “el tren vive en España el mejor momento de su historia”, a raíz de las últimas cifras de pasajeros en la estación de Santiago de Compostela... Se le han olvidado las ¡11 horas de caos! que vivieron los viajeros de un tren Alvia Madrid-Santander (trayecto que suele durar cuatro horas y media) hace unas semanas. Y en el entretanto, en Talgo, tras vetar a los húngaros por puro sectarismo ideológico, podrían entrar polacos e indios.
Las cifras avalan la afirmación de que el tren vive en España el mejor momento de su historia. “El tren en Santiago rompe su techo en 2024 y alcanza más de 4,3 millones de viajeros”. https://t.co/NgQJdQW6sr a través de @elcorreogallego
— Oscar Puente (@oscar_puente_) January 26, 2025
Recuerden que el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible ha abierto la puerta a que el fabricante ferroviario Pesa -controlado por el Estado polaco a través del fondo público estatal Polish Development Fund (PDF)- y el indio Jupiter Wagons (que tiene entre sus accionistas al eslovaco Tatravagonka, con un 19,24% de su capital) tomaran participaciones en Talgo. Sin embargo, a la luz de sus respectivos movimientos parece que no se conforman y quieren más. Pesa ha fichado al banco galo Société Générale y al bufete Baker McKenzie ... con la vista puesta en lanzar una OPA; y Jupiter Wagons ha hecho lo propio con la empresa de servicios financieros estadounidense Lazard y el bufete Eversheds Sutherland... para dar el mismo paso.
El escudo antiopas está en pausa, tras la caída del ‘decreto ómnibus’ la semana pasada… por lo que ya no sólo hay ‘desastre Puente’ sino ‘desastre Gobierno Sánchez’
Los polacos aspiran al 29,5% del capital de Talgo, por ahora, aunque su objetivo final sería fusionarlo con Pesa. Esto último recuerda a lo que en su día ofreció el checo Skoda pese a estar en pérdidas, al que buscó el Gobierno Sánchez (y también lo hizo con su matriz, PPF Group) con la idea de forzar a Criteria Caixa a entrar en Talgo, pero no hubo suerte. Al mismo tiempo, el fondo estatal polaco que es dueño de Pesa se ha abierto a cerrar acuerdos estratégicos con inversores españoles para valorar una oferta amistosa, que permita mantener la españolidad de Talgo y recibir el visto bueno del Gobierno. Por su parte, Jupiter Wagons quiere hacerse con más del 30% del capital del fabricante ferroviario que preside Carlos de Palacio y Oriol y tiene como CEO a Gonzalo Urquijo.
En el entretanto, no hay que olvidar el interés de la siderúrgica vasca Sidenor, que sigue siendo la mejor posicionada y entraría en Talgo con apoyo del Gobierno central y del vasco. Eso sí, hasta ahora su oferta (4 euros por acción) por el 29,9% del capital que posee Trilantic ha sido rechazada por dicho fondo, que quiere, como mínimo, los 5 euros que en su día ofreció el consorcio húngaro Ganz-Mavag. Y por cierto, cabe destacar que el fondo ya puede vender su participación sin depender de los dos socios que tenía en la sociedad Pegaso -la familia Oriol y la familia Abelló-, la cual controlaba el 40% del capital. Además, el escudo antiopas está en pausa, tras la caída del ‘decreto ómnibus’ la semana pasada… por lo que ya no sólo hay ‘desastre Puente’ sino ‘desastre Gobierno Sánchez’ y también demasiado gusto por el intervencionismo (como ha quedado patente en Telefónica recientemente). Y es que se insiste en que Talgo es una empresa estratégica por su tecnología de cambio de ancho de vía.
El CEO de Iryo, Simone Gorini, vuelve a cargar contra los cánones que pagan a Adif...
Recuerden que Puente no puede fusionar Renfe, Adif y Talgo, ergo lo niega... pero ha dicho que va a privatizar Renfe. Por su parte, Simone Gorini, CEO de Iryo, ha insistido en cargar contra los cánones de Adif... en una entrevista en El Economista, donde refiere que “los nuevos cánones propuestos por Adif no responden a las necesidades del sector”. Este operador ferroviario italo-español entró a competir con Renfe en alta velocidad sabiendo las reglas del juego, al igual que Ouigo, pero aún no ha logrado rentabilidad. Eso sí, al menos, Iryo no vende billetes a pérdidas y fabrica parte de sus trenes (el sistema de propulsión) en la planta que el fabricante ferroviario francés Alstom tiene en Trápaga (Vizcaya).