El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este martes que Finlandia y Suecia asistirán a la cumbre de la OTAN que se celebrará en Madrid el próximo mes de junio, después de que ambos países hayan iniciado formalmente el proceso de adhesión a la Alianza, recoge RTVE.

Así lo ha anunciado Sánchez durante una comparecencia en el Foro Económico Mundial, que se celebra en Davos (Suiza), una cita que se presenta para el Ejecutivo como una oportunidad para exponer el potencial inversor que ofrece España, de forma especial en el sector de los microchips, en medio de la incertidumbre económica mundial agravada por la guerra en Ucrania.

La próxima cumbre de la OTAN se celebrará en Madrid los días 29 y 30 de junio, y el jefe del Ejecutivo ha subrayado que espera que de ella salga una mayor unidad entre la UE y la Alianza Atlántica. En ese contexto, ha informado de que su Gobierno está preparando una cena informal entre los líderes europeos, pertenezcan o no a la organización militar, y los de la OTAN.

Para Sánchez, la inclusión de ambos países en la OTAN es muy importante para la estabilidad de la Unión Europea y para el futuro de la Alianza. "El sentimiento y la voluntad política de los aliados es acoger a estos dos países", ha señalado el presidente, al tiempo que ha confirmado que el Gobierno español va a "acelerar el proceso parlamentario para cumplir el compromiso" con ambos.

Sánchez, ha asegurado este martes que Finlandia y Suecia asistirán a la cumbre de la OTAN que se celebrará en Madrid el próximo mes de junio

Además, poco antes de su intervención, en una una entrevista con la cadena estadounidense CNBC, Sánchez ha resaltado la capacidad regasificadora y de almacenamiento del sur de Europa, y España en particular, pues a su juicio representan una oportunidad para la Unión Europea (UE) para dar respuesta a la escasez de suministro de gas procedente de Rusia, ha recogido RTVE.

"España, la Península Ibérica y, diría, el sur de Europa, tendrán la oportunidad de dar una respuesta a esta dependencia energética de la energía fósil de Rusia”, ha dicho Sánchez.

En este sentido, el presidente del Gobierno ha señalado que, en su opinión, el mercado energético de la UE no está bien diseñado y no responde al estrés provocado por esta crisis al no contar con fuertes interconexiones en el seno de la UE, por lo que ha apuntado la importancia de llevar a cabo una gran reflexión a nivel europeo sobre cómo adaptar el sistema energético.

A este respecto, Sánchez ha recordado que España representa alrededor del 37 % de la capacidad total de regasificación de la UE y la Península Ibérica concentra cerca de la mitad de la capacidad de almacenamiento de GNL de la UE, añadiendo que "el único problema es la interconexión". "Por eso creo que es importante que la Comisión haga una declaración sobre la necesidad de aumentar e intensificar las interconexiones entre la Península Ibérica y el resto de la UE", ha insistido.

Es importante que la Comisión haga una declaración sobre la necesidad de aumentar e intensificar las interconexiones entre la Península Ibérica y el resto de la UE", ha insistido.

Por otro lado, el presidente del Gobierno ha defendido que los fundamentales de la economía española "son bastante fuertes". Mientras que las previsiones del Ejecutivo apuntan a un crecimiento del PIB del 4,3 % en 2022, también ha destacado que la evolución del empleo "es bastante impresionante", con más de 20 millones de ocupados, una cifra que no se alcanzaba en España desde hace años.

"Nuestras previsiones apuntan a un déficit inferior al 3 % del PIB para 2025 y una deuda pública inferior al 110 % del PIB", ha recordado para subrayar el compromiso del Gobierno con la consolidación fiscal y la transición hacia una economía verde en España.

Asimismo, con la agenda de reformas y los fondos de recuperación europeos, Sánchez ha asegurado que el Gobierno está listo para amortiguar las consecuencias de la guerra y modernizar la economía, así como aumentar la competitividad y productividad. "Estamos encarando con optimismo el futuro sobre la economía española", ha afirmado.

Y todo eso lo dice Sánchez sin despeinarse y después de las sucesivas broncas —la última ayer, como recogió Hispanidad—- que le ha echado Bruselas sobre la desastrosa situación de la economía española: por el elevado nivel de deuda, de déficit, de paro...

Pero es Sánchez en estado puro: miente más que habla.