En plena crisis mundial de la automoción, Mercedes-Benz ha dado a conocer sus malos resultados de los nueve primeros meses, quedándose sin premio bursátil (-1,27%). Y es que los inversores no están contentos con los menores ingresos (-5%), ventas (-4%) y el desplome del beneficio (-31%).

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Al grupo automovilístico alemán con sede en Stuttgart le ha ido peor que al estadounidense General Motors y al francés Renault, tanto en reacción bursátil como resultados, pues aunque Renault sólo ha dado a conocer cifras de ingresos y ventas, estos han tenido alzas. En el caso del alemán, se ha visto afectado por el deterioro del mercado chino… y parece que mucho más que General Motors, por lo que ahora quiere centrarse en aumentar la eficacia y en reducir costes (incluidos los de personal), según ha señalado el director financiero de Mercedes-Benz, Harald Wilhelm.

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Este último ha defendido la estrategia, pues llevan años trabajando en ser más eficientes en costes fijos y variables, pero la situación del mercado actual requiere que se afine “aún más”, por lo que se revisará la eficiencia en todas las categorías, incluyendo los costes de personal, material, producción o fábricas. “Ya hemos hecho mucho en los últimos años para que Mercedes sea más resistente, pero daremos un paso más y subiremos de marcha”, ha afirmado, pero sin dar más detalles, por ahora. Eso sí, sin perder de vista las ambiciones de futuro, pues continúan apostando por alcanzar los objetivos de CO2 con el desarrollo de vehículos electrificados (100% eléctricos e híbridos enchufables), pese a que tienen una demanda mucho menor de la esperada por la industria y los reguladores. “Nuestra prioridad sigue siendo desarrollar los vehículos eléctricos”, ha subrayado Wilhelm, aunque parece que será a menor velocidad de la planeada en un principio, al igual que en la mayoría de grupos del sector.

Resultados de Mercedes Benz en los nueve primeros meses de 2024

Vayamos a los resultados de los nueve primeros meses, en descenso como en el periodo enero-junio; pues han registrado bajadas en todas las magnitudes, excepto en la de inversiones en propiedades, plantas y equipos (+4%). Los ingresos han descendido un 5%, a 107.144 millones de euros, y en gran parte ha influido el deterioro del mercado chino (donde también General Motors está teniendo problemas financieros y hasta se plantea una reestructuración), pues las ventas totales han bajado un 4,3%, a 1,46 millones de unidades, sobre todo en Alemania y en Asia. 

Por su parte, el beneficio de explotación (ebit) ajustado se ha desplomado un 34%, a 10.184 millones. El beneficio neto se ha hundido un 31%, hasta 7.806 millones, después de haber ganado la mitad en el tercer trimestre (1.719 millones, un 54% menos).

El beneficio neto se hunde un 31%, hasta 7.806 millones, después de haber ganado la mitad en el tercer trimestre (1.719 millones, un 54% menos)

Respecto a las cifras del tercer trimestre, las cifras tampoco dieron demasiadas alegrías al grupo automovilístico alemán, cuando el descenso de ventas se moderó al 1.4%. Los ingresos han descendido un 7%, a 34.528 millones. El ebit ha caído un 48%, por encima de lo previsto por el consenso de analistas, a 2.537 millones, en un contexto de elevada competencia, reajustes de valoración de los vehículos eléctricos de batería (BEV, por sus siglas en inglés) y ajustes por garantías, según han destacado los analistas del Banco Sabadell. Eso sí, Mercedes-Benz mantiene sus objetivos anuales, después de que ya los rebajara el pasado septiembre. 

Y por cierto, el grupo automovilístico alemán cuenta con fábrica en nuestro país, situada en Vitoria (País Vasco). Ahora ha planteado a los trabajadores poner en marcha en 2025 un sistema de dos turnos de nueve horas en lugar de los tres turnos actuales, así como un equipo que trabaje los sábados y otro descanse, aspectos que debe negociar con los sindicatos y que parece que no han gustado demasiado.