Moderna se forró con su vacuna contra el Covid-19
Moderna perdió 4.714 millones dólares (4.358 millones de euros) en 2023, en comparación con los beneficios de 8.362 millones de dólares (7.731 millones de euros) del año anterior, ha informado el laboratorio estadounidense que es también compañía biotecnológica.
La facturación ascendió a 6.848 millones de dólares (6.331 millones de euros), un 64,4% menos.
Estos descensos en el beneficio y en la facturación se deben, según ha explicado la compañía, al descenso en las ventas de su vacuna contra el Covid-19.
Cabe recordar que Moderna fue uno de los laboratorios que utilizó el método denominado Vacuna de ARN mensajero (ARNm), basado en la producción de proteínas por parte de las células, capaces de combatir el virus, para luchar contra el Covid-19.
De hecho, en julio del año pasado, Moderna denunció a Pfizer y BioNtech por "infringir" su patente de ARNm empleada en la vacuna contra la Covid-19.
Volviendo a sus resultados, los gastos en investigación y desarrollo supusieron 4.845 millones de dólares (4.479 millones de euros), un 47% más.
Mientras que los costes de producción y venta, generales y administrativos llegaron a los 11.087 millones de dólares (10.250 millones de euros), un 12,6% más.
El consejero delegado de Moderna, Stéphane Bancel, ha señalado: “2023 fue un año de transición para Moderna, ya que nos adaptamos a un mercado endémico. Al mismo tiempo, nuestro equipo de desarrollo realizó importantes avances en la cartera de productos en los ámbitos de las enfermedades infecciosas, la oncología y las enfermedades raras, y nuestro equipo comercial aumentó la cuota de mercado de Covid-19 en Estados Unidos”.
El directivo ha adelantado la aprobación hasta junio de 2024 de vacunas para prevenir el virus respiratorio sincitial, que puede afectar gravemente a los niños.