Alcoa extiende aún más su caradura en España, donde ya sólo tiene una fábrica. Ahora ha avanzado que ha vuelto a beneficio en el segundo trimestre, pero ha avisado que los fondos para la planta de San Ciprián (Cervo, Lugo) se agotarán a fin de año.

El mayor productor estadounidense de aluminio ha adelantado que ha dejado las pérdidas entre abril y junio, y que su beneficio neto atribuido estará entre 4,6 y 23 millones de euros. De confirmarse esto el próximo día 17, cuando publique las cifras definitivas, supondría una gran mejora frente a los números rojos de 94 millones obtenidos hace un año y a los de 233 millones del primer trimestre (por el impacto de la reducción de su refinería de Kwinana (Australia). Por su parte, los ingresos habrían crecido a entre 2.633 y 2.702 millones, por los mayores precios de terceros para la alúmina y el aluminio.

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Sin embargo, la mejora en resultados no se ha traducido en un buen trato hacia nuestro país. Recuerden que quiere vender la planta de San Ciprián, pese a la gran cantidad de ayudas públicas recibidas (entre ellas, las dirigidas a afrontar el elevado precio de la energía). El presidente del comité de empresa de Alcoa, José Antonio Zan, ha señalado a EFE que “no tenemos ninguna información” sobre las visitas de inversores a la planta y si estas han concluido o no. Por ahora, la única certeza es que el productor estadounidense de aluminio no ha logrado deshacerse de esta fábrica en junio, como quería en un principio. Asimismo, hace unos días, el comité de empresa ha pedido al secretario general del PSOE en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, y a la diputada Patricia Otero explicaciones sobre la situación del proyecto para la creación de varios parques eólicos, de competencia estatal y pendientes de aprobación, sobre los que Besteiro aseguró en diciembre y durante la campaña electoral a las elecciones gallegas que “estaban salvados”, como informa El Progreso.

Desde Alcoa, su presidente y CEO, William F. Oplinger, ha presumido de “sólidos resultados preliminares para el segundo trimestre” y prevé cerrar la compra de la compañía australiana Alumina Limited alrededor del 1 de agosto. Pero sobre la planta de San Ciprián, insiste en el chantaje al afirmar que siguen trabajando en la búsqueda de soluciones energéticas viables, al tiempo que avanzan en la venta de la misma, y al hilo de la advertencia sobre que los fondos se agotarán a final de año, subraya que esa situación conllevaría tomar decisiones difíciles con un impacto adverso y potencialmente irrevocable en el empleo. ¡Qué cara más dura! Y ojo, porque en bolsa, Alcoa sí está ganando dinero: la cotización acumula una revalorización del 30,5% en los últimos seis meses y del 17,6% en lo que va de año. 

Oplinger advierte que los fondos se agotarán a final de año para la planta de San Ciprián y subraya que esa situación conllevaría tomar decisiones difíciles con un impacto adverso y potencialmente irrevocable en el empleo

Recuerden que la planta de San Ciprián cuenta con una refinería de alúmina que funciona al 50% de su capacidad desde el verano de 2022 y paró la producción de aluminio primario. Esta última actividad Alcoa se comprometió a reactivarla de forma progresiva y alcanzando normalidad para el segundo semestre de este año, aunque hace meses propuso dilatar la vuelta al 100% hasta octubre de 2025, o sea, ¡21 meses! Eso sí, manteniendo empleos... a cambio de paz social. Al final, no tuvo éxito en su propuesta y empezó el reinicio de las cubas de electrólisis el pasado 29 de enero, como se había comprometido en un principio, claro que Oplinger se guardaba un as bajo la manga: unos días antes de comenzar el citado reinicio refirió que la caja y las líneas de crédito de San Ciprián no alcanzaban para cumplir con la reactivación pactada y abrió la puerta al cierre de la planta de alúmina.