Naturgy está en vísperas de publicar sus resultados de 2024, pero no hará lo mismo con el nuevo plan estratégico 2025-2030, como se preveía en un principio desde hace meses. El motivo no es otro que el lío accionarial que afronta, pues los fondos de inversión presentes en su capital (BlackRock -desde que compró la participación de GIP-, CVC e IFM) siguen fastidiando. Y la pregunta más pertinente es: ¿va a permitir Moncloa que un grupo estatal energético de Abu Dabi controle la principal gasista española?

Esperemos que no, pues se trata de una empresa estratégica, pero tristemente parece que el Gobierno Sánchez prefiere mirar para otro lado. La operación Taqa sigue adelante, mientras la SEPI no baraja entrar en el capital de Naturgy para defender su carácter estratégico, según apuntan fuentes consultadas de los fondos de inversión.

Todo esto dentro de un contexto donde Emiratos Árabes Unidos (EAU) quiere ser un gigante en energías verdes y ha puesto sus ojos en España, pero hay un problema: nadie se fía de su palabra... porque no la tiene. Esto último lo sabe muy bien Criteria Caixa, primer accionista de Naturgy con un 26,7% y quien controla la gestión: hace meses, el holding que preside Isidro Fainé y tiene como CEO a ÁngelSimónrompió con Taqa al conocer que quería mandar en Naturgy. Recuerden que con el memorándum ya firmado, la energética emiratí quiso introducir modificaciones que le permitieran superar el 50% del capital... y por supuesto, mandar en la energética que dirige Francisco Reynés. Y en todo esto influyó el incordiante fondo australiano IFM, que llevó a cabo su segunda traición a Criteria: viajó a Abu Dabi para aliarse con los emiratíes y destronar a Criteria como primer accionista de Naturgy.

Ha resurgido la operación Taqa, pero con otros fondos implicados, en concreto, CVC y BlackRock

Ahora ha resurgido la operación Taqa, pero con otros fondos en el asunto. De hecho, Javier de Jaime, representante de CVC en España, viaja mucho a Dubái últimamente, ciudad emiratí donde está la sede de Taqa. ¿Casualidad? Por supuesto que no, y mucho menos si uno recuerda al poeta, dramaturgo, filósofo e historiador alemán Friedrich Schiller, quien defendía que las casualidades no existen. Asimismo, BlackRock se ha dejado querer y conversa con la emiratí. Y en el entretanto, Criteria intenta apaciguarles, pero no contempla lanzar una OPA sobre Naturgy.

En este contexto, no hay que olvidar que Naturgy tiene un free float (capital flotante) pequeño, que se sitúa en el 11,9%. BlackRock posee el 20,965%, tras comprar la participación del fondo GIP, y estaría dispuesto a vender gran parte y a quedarse con una mínima (de entre el 3% y el 5%) similar a la que tiene en otras muchas empresas. Por su parte, CVC sólo contempla vender su 20,715% (que posee a través de la sociedad Rioja, la cual comparte con los March) de una vez, no por partes, pues está convencido de la tesis de que vale más un 20% que 20 partes de un 1%. Además, tanto la participación de BlackRock como la de CVC tienen prima de control... y por eso se venden caro: es decir, se vende poder, pues no sólo son porcentajes relevante de capital, sino también presencia en el Consejo de Administración. Y aunque esta vez no suena el nombre de IFM (dueño del 16,023% de Naturgy), no sería de extrañar que también se sumara, pues desde que lanzó su OPA para entrar en la energética el 26 de enero de 2021 se ha convertido en su pesadilla, a pesar de que dicha oferta fracasó al no llegar a lo que los australianos esperaban. 

Tanto la participación de BlackRock (20,965%) como la de CVC (20,6%) suponen cuadi-prima de control... y por eso se venden caras: es decir, se vende poder, pues son porcentajes relevantes de capital y con presencia en el Consejo de Administración

Por su parte, ahora el Gobierno no baraja entrar en el capital de Naturgy a través de la SEPI, como se planteó hace unas semanas y a pesar de que sí lo ha hecho en Telefónica, por ejemplo, ante la entrada de la saudí STC. Pedro Sánchez ya ha logrado apoyo de partidos políticos para prorrogar el escudo antiopas y el tema no está tanto en que Moncloa pueda evitar la compra de capital por parte de Abu Dabi, pero sí puede vetar su entrada en el Consejo de Administración... aunque tenga el 99% del capital. Sería una maniobra algo similar a la que ha ido haciendo con la saudí STC en Telefónica hasta hace poco, pues la teleco saudí ya ha entrado en el Consejo de la teleco que preside Marc Murtra desde hace un mes. Es decir, no se trata de porcentaje en el capital, sino de quién manda.