La gran banca registró beneficios récord hasta septiembre, pero fueron recogidos por el mercado con caídas abultadas en bolsa
La Bolsa española no ha sido la única, pero sí la que más cayó este jueves en Europa. Al final, y tras un inicio prácticamente plano, el Ibex cerró la sesión con pérdidas del 3,7% y puso en peligro los 8.000 puntos (cerró en 8.011 puntos). Los valores más castigados, Siemens Gamesa (-9,2%), Meliá (-7,7%) y Grifols (-7,5%). Entre los menos, Arcelor Mittal (-0,4%), Enagás (-1%) y Naturgy (-1%).
El pánico se ha apoderado de los mercados porque el futuro es más incierto que nunca con la guerra de Ucrania, pero, sobre todo, porque tienen claro cómo enfrentarse a la estanflación, el peor de los posibles escenarios económicos: crecimiento cero, pero con precios disparados.
Y sí, en 2021 el PIB español aumentó un 5%, pero venía del subsuelo: en 2020 se hundió un 10,8%. Estamos lejos del nivel prepandemia y con una inflación superior al 7%. Si no es estanflación se le parece mucho.