Un desastre: el paro sube en 19.768 personas en septiembre (+0,7%) y España lidera el desempleo general y el juvenil en la UE y en la eurozona
El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo alcanza un total de 3.108.763 personas desempleados. En este mes de marzo, el paro bajó en 2.921 personas, y ya saben cómo lo ha anunciado el Gobierno, hecho histórico con la mayor caída de la serie histórica.
Pero esta recuperación que venden desde Moncloa tiene varias trampas.
Efectivamente se ha producido un descenso, pero es el menor de toda la serie comparable, que comienza en 1996. Además, el paro sólo bajó en marzo en el sector servicios, con 18.090 desempleados menos, y subió en el resto de sectores, por ejemplo, en el colectivo sin empleo anterior sumó 6.764 parados, en la construcción aumentó en 5.664 personas y en la agricultura acumuló 1.568 desempleados más.
Y seguimos con el muerto viviente de Sánchez, los ERTE, que son ayudas públicas y que sirven para anestesiar a las empresas y reducir la iniciativa propia. El Gobierno nos vende que el número de trabajadores en esta modalidad bajó en marzo en 22.295 trabajadores, hasta un total de 79.441 afectados, que no son pocos. Pero recordemos que con la nueva reforma laboral tenemos los ERTE por causas económicas, técnicas, organizativas y de producción (ETOP) no relacionadas con la pandemia, que es otra forma de decir ERTE, estos subieron hasta los 17.162 trabajadores. Además, los nuevos mecanismos RED que, de nuevo, son otra manera de decir ERTE. A la cara dura de decir que los afectados por estos mecanismos no están parados, se le suma el gasto derivado de esta prestación, que alcanza los 82 millones de euros.
Y seguimos con las verdades a medias, los datos de indefinidos, ya sabemos que Yolandísima y Escrivá son los autoproclamados líderes de la lucha contra la precariedad. Según los datos de afiliación, en marzo, se registraron 1.671.841 contratos, de todos ellos, 513.677 fueron contratos indefinidos. La maquinaria de Moncloa nos ha dicho que es la mayor cifra de toda la serie de cualquier mes, que los contratos infinidos suben más de un 30% y que los contratos indefinidos han triplicado su peso en el mercado laboral. Claro, difícil me parece que se pueda contratar de otra forma después de la entrada en vigor de la reforma laboral, que lo único que hace es encorsetar el mercado laboral, obligando a que casi la totalidad de contratos deban ser indefinidos.
La comparación con la serie histórica es algo que gusta mucho al ejecutivo, es decir, compararnos con nosotros mismos para hacerlo menos mal que el anterior, porque si nos comparamos con otros, ahí la cosa cambia. España sigue siendo el país de la Unión Europea, la Eurozona y de la OCDE con más desempleo.
En febrero de 2022, la tasa de desempleo desestacionalizada de la zona euro fue del 6,8%, según los datos de la oficina de estadística comunitaria Eurostat. En la Unión Europea (UE), el paro fue del 6,2%, en España, la reducción fue de dos décimas porcentuales, de modo que el indicador se situó en el 12,6 %, la mayor tasa de todo el club comunitario.
Y parecía que Garamendi despertaba, pero, ante los datos ofrecidos, ha asegurado que hay que ser cautos y que parece que la reforma laboral está "dando sus frutos". ¿En serio, Garamendi?
El sanchismo, las mayores mentiras de la serie histórica.