Wayne Griffiths preside la patronal de fabricantes automovilísticos e insiste en la importancia de incentivar la compra de coches electrificados / Foto: Pablo Moreno
Este martes, en el IV Foro Anfac organizado por esta patronal que agrupa a los fabricantes de automóviles y camiones de nuestro país, ha vuelto a quedar patente que o se dan ayudas eficaces o no habrá el avance del coche eléctrico que se necesita para mantener la industria y los 2 millones de empleos del sector. “Tenemos un gran país”, ha comenzado refiriendo Wayne Griffiths, CEO de Seat y Cupra, y presidente de Anfac, pues no sólo se trata del segundo fabricante de coches en Europa, sino que ha recuperado el octavo puesto mundial, superando a Brasil.
También ha señalado que el automóvil es “el único sector industrial donde fabricantes (de vehículos -Anfac- y de sus componentes -agrupados en la asociación Sernauto-), sindicatos y trabajadores han creado una hoja de ruta para caminar juntos porque sabemos que tenemos que electrificar”... y más dada la prohibición que la UE fijó a los coches de combustión para 2035 (decisión que se revisará en 2027... pero que ya no se ve tan clara). De 16.000 vehículos electrificados -incluye eléctricos e híbridos enchufables- en 2019 se ha pasado a más de 320.000 en 2023, que suponen el 30% de la producción total, pero deben ser más; y en ventas, la media de coches electrificados es del 22,3%, mientras España sigue en el vagón de cola con un 12%. “Las empresas hemos aceptado el reto y estamos invirtiendo miles de millones, soy optimista por naturaleza, pero estoy preocupado porque seguimos sin aumentar ventas y recuperar el terreno frente a otros países vecinos (Alemania, Francia o Portugal), no es un problema de oferta sino de que el plan de ayudas Moves no funciona”. Además, los coches de bajas emisiones son parte de la solución.
Griffiths pide una fiscalidad positiva que incluya, por ejemplo, una reducción del 100% del IVA en la compra de un coche eléctrico; y sustituir el Plan Moves por un plan de ayudas directas
Griffiths ha pedido una fiscalidad positiva que incluya, por ejemplo, una reducción del 100% del IVA en la compra de un coche eléctrico, como ha hecho Portugal; y sustituir el Plan Moves por un plan de ayudas directas, porque “tenemos que llegar al 25% de ventas de coches electrificados cuanto antes”. “No puede ser que Hacienda dé portazo al cambio climático”, ha subrayado, al tiempo que ha hablado de “reforzar la política industrial”, contar con energía barata, mantener la competitividad y la flexibilidad laboral, y luchar contra el absentismo”, mandando un mensaje a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz: “No tiene sentido reducir la jornada laboral en un sector en el que de media se trabaja 34 horas a la semana”.
Griffiths manda un mensaje a Yolanda Díaz al hilo de su última propuesta: “No tiene sentido reducir la jornada laboral en un sector en el que de media se trabaja 34 horas a la semana
Para la secretaria de Estado de Industria, Rebeca Torró, “la movilidad será sostenible o no será” y confía en que “España puede ser un hub de electromovilidad”, entre otras cosas, usando los fondos europeos... que han servido para lanzar varios PERTE. “Hay que hacer que los vehículos sean más accesibles y competitivos, y reforzar la red de puntos de recarga para que crezca al mismo tiempo que las ventas, para lo que también debe haber despliegue energético”, ha destacado. Es más, considera que “Industria y Energía son un binomio inseparable”, ¿será un aviso a Teresa Ribera, pues ahora ambas materias están en distintos ministerios?
Por su parte, Francisco José Riberas, presidente ejecutivo de Gestamp y de Sernauto (la asociación que agrupa a los fabricantes de componentes automovilísticos), ha apostado por la industria en su intervención, recalcando que se debe “hacer la transición correcta, pero no perder la industria por el camino”. Riberas ve positivos los PERTE, pero considera que debemos conseguir que sean eficaces, se actúe rápido, llegue el dinero y se movilice la inversión, porque “el PERTE acompaña, no sustituye la inversión privada”, y se haga en una cantidad suficiente. Asimismo, cree que debe mejorarse el tratamiento fiscal a los temas de innovación y que “España tiene que ser un país atractivo y cómodo para que los fabricantes inviertan”, y para ello, las ventas deben aumentar, así como la red de puntos de recarga.
Riberas considera que “España tiene que ser un país atractivo y cómodo para que los fabricantes inviertan”
Respecto a la infraestructura de recarga, José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona y de Acciona Energía, ha señalado que su desarrollo se ve afectado por el círculo vicioso que hay entre el escepticismo y el miedo del consumidor y los del inversor, y que las Administraciones son las que pueden romper dicho círculo al promocionar inversiones, porque “países que han llegado al 25% de ventas de electrificados lo han hecho incentivando”, y además, “el Gobierno debe dar certidumbre al cliente”. Él se considera un recién llegado al sector del automóvil aprovechando la disrupción actual, aunque su compañía se ha centrado en la movilidad urbana y en los puntos de recarga dado que se dedican a energías renovables. Eso sí, su gran apuesta en esto último es la infraestructura con baterías intercambiables que se pueden cambiar en 30 segundos.