El sector del lujo lleva un tiempo resintiéndose en sus ventas… y por eso se están dando fusiones y compras (la penúltima se ha visto en Italia, pues Prada ha adquirido Versace, su eterna rival). Un menor ritmo de ventas que ahora se ha visto en el conglomerado de lujo francés Moët Hennessy Louis Vuitton (más conocido por las siglas LVMH) y que ha recibido castigo bursátil… arrastrando incluso a Puig, el grupo español de perfumería, cosmética y moda que cuenta con 17 marcas de lujo en su portfolio.

Este martes, la cotización de LVMH cae casi un 7%, tras decepcionar con las menores ventas del primer trimestre. De esta forma a su presidente y CEO, Bernard Arnault (76 años), se le complica recuperar puestos en la lista Forbes, que ha vuelto a ser liderada por Elon Musk, mientras el millonario francés ha pasado a la quinta posición por la crisis del lujo. Eso sí, Arnault podrá seguir al frente de LVMH nueve años más: se propondrá elevar la edad límite para los cargos de presidente y CEO de 80 a 85 años en la Junta de Accionistas que se celebrará el próximo 17 de abril… y se aprobará porque la familia Arnault controla el 48% del capital y el 64% de los derechos de voto.

Tras unos malos resultados de 2024, entre enero y marzo, los ingresos de LVMH han descendido un 11,9% en términos absolutos, a 20.311 millones de euros; y en un 3% en términos orgánicos. En esto ha influido, principalmente, la caída de ventas del 11% en Asia-Pacífico (sin incluir Japón), que han aportado el 30% del total; pero también se han registrado descensos en EEUU (-3%) y Japón (-1%); siendo Europa el único mercado con crecimiento de las ventas orgánicas, en concreto, del 2%.

Tanto LVMH como Puig bajan en bolsa este Martes Santo, pero ojo, porque acumulan una depreciación cercana al 38% en el último año y desde su debut, respectivamente

Por negocios, destaca el descenso en moda y marroquinería (-3,6%, a 10.108 millones), que aporta cerca del 50% de los ingresos; así como en el de vinos y bebidas espirituosas (-7,9%, a 1.305 millones). Por su parte, el comercio minorista selectivo ha ingresado 4.189 millones (+0,3%), representando el 21% de total; la división de joyas y relojería, 2.482 millones (+0,6%); y la de perfumes y cosméticos, 2.178 millones (-0,2%).

El descenso de los ingresos ha sido castigado en bolsa, donde la cotización de LVMH cae casi un 7%. Claro que también conviene recordar que acumula una depreciación bursátil del 19% en el último mes, donde han influido bastante los aranceles de EEUU; del 22% desde el pasado 1 de enero y de casi el 38% en el último año. El conglomerado francés “ha demostrado una buena capacidad de resistencia y ha mantenido su potente impulso innovador a pesar de un entorno geopolítico y económico inestable”, ha referido en un comunicado, así como el hecho de que “se mantiene vigilante” y confía en una recuperación del sector a futuro, pero por ahora, esta se está retrasando. Los analistas del Banco Sabadell esperaban una acogida negativa en el parqué y extensible al resto del sector, tal y como ha sucedido. Por ejemplo, se ha visto en el grupo español Puig: su cotización baja un 2,4% este martes, pero acumula una depreciación del 13% en el último mes, del 16,5% desde el 1 de enero y del 37,7% desde su debut el pasado 3 de mayo.