Una de las primeras medidas que propuso Soledad Núñez poco después de ser nombrada subgobernadora del Banco de España fue -atención- “flexibilizar” las exigencias para prevenir el blanqueo de capitales, “donde esté justificado”. Fue un estreno cuanto menos inquietante que recogimos en Hispanidad.

El caso es que después de un periodo con apariciones públicas contadas, la número dos del BdE reapareció esta semana en varios foros, aunque nos vamos a centrar en su intervención en el Club Diálogos para la Democracia. Allí habló de dos asuntos de rabiosa actualidad: la OPA BBVA-Sabadell y el euro digital.

“A nivel europeo es verdad que se necesitan entidades más fuertes (…). Por otra parte, también es verdad que las entidades grandes tienen sus riesgos”, afirmó en referencia al ‘too big to fail’ de la pasada crisis financiera.

En otras palabras, cuidado con el argumento del BBVA de que el banco resultante será mejor porque será más grande, por otra parte, el argumento preferido de los fondos, que prefieren burro grande, ande o no ande. “Tiene que haber entidades grandes y entidades pequeñas”, remató Núñez para zanjar el tema. Accionistas del Sabadell: tengan muy en cuenta estas palabras.

Una de las ventajas de Soledad Núñez es que en ocasiones dice lo que muchos piensan pero no se atreven a verbalizar. Por ejemplo, afirmó que “es posible” que desaparezca el dinero en efectivo, aunque no sería algo inmediato sino a muy largo plazo. ¿Seguro? El BCE está acelerando el euro digital para que esté operativo este mismo año, después del verano, y ya hay países como la modernísima Suecia que se están planteando eliminar el efectivo.

La implantación del euro digital no se hará de golpe y porrazo, sino poco a poco, de tal manera que cuando los españoles nos queramos dar cuenta ya será demasiado tarde y, además, nos habremos acostumbrado a pagar con el móvil, con Bizum, con el reloj o con tarjeta. Con todo menos con efectivo, la única manera que garantiza la privacidad del que paga.

Y una manera sutil de ir reduciendo el efectivo es eliminando cajeros automáticos. Según el Banco de España, el efectivo retirado en cajeros, en 2024, alcanzó los 127.485,90 millones de euros, un 2,08% más que en 2023 y la cifra más elevada de la historia de nuestro país. Eso sí, como denunció la asociación Denaria, el número de operaciones se redujo un 1,45%, hasta 683,39 millones. En otras palabras, los españoles retiraron más dinero en menos operaciones porque hay menos cajeros y Juan Español, cuando va al cajero, aprovecha para sacar más efectivo. En concreto, un 3,21% más de media, hasta los 186,5 euros.

Pero tranquilos, el euro digital no viene a sustituir al efectivo… al menos de momento. Hoy no… mañana.