Tras La Sirena, el independentismo se venga de Carrefour en los tribunales, que avalan la multa de 7.500 euros por no etiquetar en catalán algunos productos en 2017. En concreto, unos pañales y un peluche.

El Juzgado contencioso-administrativo número 8 de Barcelona ha rechazado el recurso presentado por la cadena de distribución francesa, según informa Crónica Global. Así, ha confirmado la sanción de 7.500 euros impuesta por la Agencia Catalana de Consumo, que pertenece al Departamento de Empresa y Trabajo de la Generalitat de Cataluña, y tanto los hechos como la sanción se remontan a la época en que la Generalitat estaba dirigida por Carles Puigdemont. Una multa que se produjo tras una denuncia de Plataforma per la Llengua y ante la que Carrefour primero recurrió ante la Generalitat y después ante la justicia, pero sin éxito en ninguno de los dos casos.

Relacionado

El citado juzgado ha considerado que la sanción es “proporcional” y con “criterios acertados” por incumplir el Código de consumo de Cataluña… y por tanto, vulnerar los derechos lingüísticos de los consumidores catalanohablantes. Curiosamente, no se considera lo mismo cuando no se etiqueta productos en castellano o se intenta que sólo se hable catalán en las escuelas, hospitales, etc. 

Relacionado

Recuerden que en plena cuenta atrás de las elecciones autonómicas catalanas del pasado 12 de mayo, la cadena líder en alimentos congelados La Sirena fue objeto de un boicot en las redes sociales porque su dueño, el empresario multimillonario badalonés José Elías (quien ahora va a entrar en la ampliación de capital de OHLA), por preferir los vídeos en castellano en vez de en catalán. ¡Algo intolerable! 

Relacionado

Y ojo, porque la sanción a Carrefour aunque es pequeña... podría sentar precedente para casos similares de otras empresas que denuncie el independentismo por el tema del catalán.