El magnate mexicano Carlos Slim quiere seguir haciéndose con el mercado inmobiliario en España
El consejo de Metrovacesa ha rechazado la OPA planteada por FCC, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La decisión se basa en los informes que encargaron a BofA Securities para analizar la operación desde un punto de vista financiero, opinión que ha sido desfavorable alconsiderar que la oferta "no recoge adecuadamente el valor intrínseco de las acciones de Metrovacesa".
La opa de FCC sobre el 24% del capital de Metrovacesa fue admitida por parte la CNMV el pasado 5 de mayo, después de que FCC redujera a 7,2 euros por título el precio ofrecido, ya que Metrovacesa optó por abonar un dividendo de 0,6 euros por acción el 20 de mayo, importe que FCC descontó al precio inicial de 7,8 euros por acción. La oferta está dirigida a 36,4 millones de acciones de Metrovacesa, sobre un total de 151,67 millones de títulos. Y supondrá un importe de 262 millones de euros.
De salir con éxito la operación, FCC se quedaría con una participación del 29,4087%, puesto que el mejicano ya disponía de participación en Metrovacesa, a través de Inversora Carso (5,49%).
FCC presentaba, como garantía de la operación, un aval por importe de más de 262 millones de euros de Banco Santander, otro de los grandes accionistas de Metrovacesa (49,362%), que también ha comunicado que no acudirá a la oferta, al igual que el otro gran accionista, BBVA, que cuenta con el 20,849% del accionariado.
Una cosa es acabar con el pequeño accionista, y otra muy distinta que ellos no consigan hacer negocio con ello. La negociación acaba de comenzar, y Slim no suele dar su brazo a torcer: para empezar, el precio sobre el que inician las negociaciones es bajo
La decisión la han comunicado Enrique Migoya y Cesáreo Rey-Baltar, consejeros dominicales en representación del Grupo BBVA, y, por parte del Santander, Mariano Olmeda, Carlos Manzano, Ana Bolado Valle y Francisco Javier García-Carranza, hombre fuerte del Santander en inmobiliario y que es, a su vez, presidente no ejecutivo en representación del banco en Merlin Properties.
Esta opinión se encuentra alineada con la de otros analistas que se conocieron la pasada semana, así, ninguno de los consejeros titulares de acciones de Metrovacesa aceptará la oferta, al menos de los que representan el 70%, es decir, BBVA y Santander.
Pero aún queda por saber la opinión del pequeño accionista, que deberá decidir si acude o no a la OPA, cuyo plazo de aceptación concluye el próximo 14 de junio. Como ya hemos dicho en Hispanidad, los accionistas están en una posición incómoda, de no acudir a la oferta, se quedan en una cotizada controlada por dos grandes accionistas, algo que no tiene mucho recorrido en bolsa, por no decir ninguno. Y porque ya se encargarán ambos, BBVA y Santander, de que la retribución de dividendo sea la estrictamente necesaria.
Como adelantamos en Hispanidad, esta operación es un pelotazo 'a pachas' entre Botín y Slim, y de salir la opa adelante, el magnate mejicano 'limpiaba' al Santander su inmobiliaria de accionistas minoritarios, y luego ya se vería quién manda y quién paga. Es decir, si Slim le compra Metrovacesa al Santander y a BBVA, o al revés, y ha sido aquí donde empieza el conflicto.
Slim daba el primer paso con esta oferta, y 'marcaba precio' a la acción, precio que le ha parecido muy bajo a Santander y a BBVA: una cosa es acabar con el pequeño accionista, y otra muy distinta que ellos no consigan hacer negocio con ello. La negociación acaba de comenzar, y Slim no suele dar su brazo a torcer: para empezar, el precio sobre el que inician las negociaciones es bajo.