El CEO de Statkraft, Christian Rynning Tønnesen, destaca que siguen “avanzando en nuestra ambiciosa estrategia de crecimiento verde, para desarrollar la energía renovable que tanto necesitamos”
Statkraft ha sacado tajada de los altos precios y de sus operaciones en 2022, pues ha logrado récord de ingresos y de resultado neto y operativo (ebit). Y el Estado de Noruega, propietario de la compañía, saldrá muy bien parado porque recibirá un dividendo récord de 1.700 millones de euros, según ha anunciado su CEO, Christian Rynning-Tønnesen.
La empresa es líder mundial en generación hidroeléctrica y en producción de energía renovable en Europa, y tiene un gran papel en el mercado de los PPA (contratos de compraventa de energía a precio fijo y a largo plazo). En 2022, ha obtenido unos ingresos netos de operaciones de 7.300 millones, frente a los 4.100 millones del año anterior y el tropiezo en el segundo trimestre (-118 millones por el tipo de cambio y el alto pago de impuestos). Por su parte, el ebit ha alcanzado el récord de 5.200 millones, superando notablemente el de 2.900 millones de 2021; y el beneficio neto ha ascendido a 2.800 millones, frente a los 1.600 millones del año anterior.
“Nuestra ambición es concluir una nueva planta renovable cada nueve días para 2025, principalmente solares y eólicas”, ha señalado el CEO, Christian Rynning-Tønnesen
Cifras obtenidas gracias “tanto a los precios altos como la creación de valor de las operaciones de mercado de Statkraft”, según ha explicado el CEO, añadiendo que siguen “avanzando en nuestra ambiciosa estrategia de crecimiento verde, para desarrollar la energía renovable que tanto necesitamos”. Una ambición estratégica que se refleja en el hecho de que aumentó su objetivo de producción renovable un 50%, a 100 teravatios hora (TWh) en 2030, destinando la mayoría de las nuevas inversiones a generación hidroeléctrica, eólica terrestre y solar. “Como mayor productor renovable de Europa, contamos con una posición de excepción y tenemos el fuerte compromiso de aportar más capacidad renovable y de acelerar la transición energética tanto en Noruega como fuera de sus fronteras. Nuestra ambición es concluir una nueva planta renovable cada nueve días para 2025, principalmente solares y eólicas”, ha añadido Rynning-Tønnesen. Y va bastante bien, porque va camino de cumplir con el objetivo de desarrollar entre 2.500 y 3.000 megavatios (MW) de capacidad anual para 2025.
Statkraft también continúa aumentando su presencia en la Península Ibérica. En nuestro país ha empezado este año con “700 MW renovables en operación y esperamos continuar en esta senda de crecimiento”, ha referido José Miguel Ferrer, su director general en España y Portugal. “Tenemos una cartera en desarrollo de 2.300 MW y un firme compromiso con una transición energética justa, que escuche a ciudadanos, industria y territorios”, ha añadido. Además, la compañía noruega gestiona en la Península Ibérica una cartera de 1.700 MW en PPA (entre ellos el alcanzado con la energética austríaca Verbund en la planta fotovoltaica extremeña La Solana) y es motor de la transición energética tanto como comprador como suministrador de energía.