Juan Lladó, presidente de Técnicas Reunidas
No es lo mismo ampliar capital para financiar el crecimiento que para amortizar deuda y, lógicamente, los inversores no responden de la misma manera a una y otra motivación. Lo hemos visto este martes con la ampliación de Técnicas Reunidas, comunicada a la CNMV en la tarde del lunes.
Efectivamente, la empresa controlada por la familia Lladó ampliará capital por 150 millones de euros, el equivalente al 43,7% del capital actual de la compañía, a un precio de suscripción de 6,15 euros por título, esto es, un descuento del 38,6% respecto al precio de cierre del lunes. Una bajada considerable que ha arrastrado a la cotización, que este martes pierde más de un 16,8%, hasta los 8,3 euros por acción. Técnicas Reunidas vale actualmente 465 millones de euros en bolsa.
Lo más preocupante, sin embargo, son los motivos de la ampliación. Un tercio del importe se destinará “a financiar los gastos operativos que requerirá el segmento de Tecnologías Bajas en Carbono en el contexto de la transición energética cubriendo las necesidades previstas de caja anuales de dicho segmento para los años 2023, 2024 y 2025”, anunció la compañía.
Otro tercio servirá para “optimizar la situación de la caja neta ajustada del Grupo, reforzando los niveles de caja en línea con el tamaño del Grupo y su evolución prevista en el futuro”, y el último tercio irá destinado a “seguir reduciendo el nivel de endeudamiento del Grupo, en concreto, 33,5 millones a amortizar el préstamo sindicado ICO y 14 millones a amortizar el contrato de financiación sindicado CESCE”, afirmó la compañía en el comunicado.
Todos tranquilos, porque la familia Lladó (32% del capital) ha anunciado que acudirá a la ampliación, junto a Cobas Asset Management (11%). Azvalor AM (6,1%) también ha manifestado su intención de acudir a la ampliación para no diluir su participación.
Conviene recordar que, aunque la tendencia actual es positiva, Técnicas Reunidas viene de unos años difíciles: en 2021 perdió 192 millones y en 2022, 34,5. “Tenemos pocas dudas sobre lo que nos espera: un superciclo plurianual de inversión en el sector energético, tanto en el sector tradicional como en el de bajas emisiones de carbono”, afirmó Juan Lladó durante la presentación de resultados de 2022. Eso está muy bien, pero primero hay que reducir la deuda.