Telefónica, ese oscuro objeto de deseo
La operadora saudí STC no podrá tener representación en el Consejo de Administración de Telefónica, ni podrá pasar del 10% del capital de la compañía española. Son las dos condiciones que Moncloa ha puesto al fondo soberano de Arabia Saudí, Public Investmente Fund (PIF), controlado por el siempre inquietante Bin Salman.
La primera condición merece una aclaración y la segunda, también. Para empezar, según la CNMV, PIF tiene, de manera indirecta, un 4,9% del capital de Telefónica que, sumado al 5% que posee a través de instrumentos financieros, hace un total del 9,9% del capital. Es decir, si Telefónica tiene 16 consejeros, según marca la ley, PIF tiene derecho a 1,6 consejeros, es decir a uno.
¿Que el Gobierno le ha exigido que no puje por él? Muy bien, pero a estas alturas es difícil imaginar que Salman vaya a cumplirlo. Tal vez aguante un tiempo sin hacerlo, pero finalmente lo exigirá y Sánchez -si es que sigue en Moncloa- no podrá impedirlo.
La segunda condición es una tautología, porque el límite del 10% ya está contemplado en la ley anti opas aprobada durante la pandemia, precisamente para proteger a las empresas españolas. En todo caso, aunque oficialmente no ha sobrepasado ese límite, PIF ya tiene el 12%, junto a Morgan Stanley.
Lo más curioso de todo es que ha sido el CEO de Caixabank, Gonzalo Gortázar, quien ha hablado del asunto. Ha sido este lunes, durante el XIV Encuentro Financiero organizado por Expansión y KPMG. “La inversión ha sido sorpresiva, quizá no es la mejor manera de entrar en una empresa, pero es una buena noticia atraer dinero hacia una compañía española porque necesitamos más inversión exterior hacia el país”. “Debemos analizar las posibilidades de una cooperación, porque se trata de una empresa del sector”, ha afirmado.
Sorprende porque, siendo cierto que Caixabank posee el 3,5% de Telefónica, también lo es que quien tiene un consejero y además es vicepresidente -Isidro Fainé- es Criteria, que actualmente posee el 2,5% de la operadora. Entre los dos suman el 6%, pero mientras Caixabank está bajando su participación, Criteria la está aumentando, de tal manera que la suma de ambas siga siendo 6.
Por cierto, la entrada de STC es una inversión financiera y no crea riqueza alguna sino que supone comprar una riqueza que ya existe. Y la ha comprado Bin Salman, cuya reputación le precede.