Para Thyssenkrupp, “regresar a un flujo de caja libre positivo sostenido antes de las fusiones y adquisiciones, en una perspectiva de todo el año, sigue siendo nuestro objetivo prioritario", según ha señalado su director financiero
Thyssenkrupp se ha atascado, pese a mejorar beneficio, ventas y pedidos en los nueve primeros meses (octubre a junio) de su ejercicio fiscal. Y es que ha rebajado sus pronósticos de ganancias de cara al conjunto del ejercicio y ha acometido unas provisiones de 480 millones en su división de acero por el deterioro que ha supuesto la subida de los tipos de interés.
El grupo industrial alemán ha ganado 746 millones de euros entre octubre y junio, frente a las pérdidas de 231 millones de hace un año. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) ha pasado de 1.006 millones a 2.533; y el beneficio neto de explotación (Ebit) ajustado, de 564 millones a 1.901 millones. Por su parte, las ventas han aumentado un 24%, a 30.571 millones; y los pedidos, un 34%, hasta 33.906 millones.
En su tercer trimestre fiscal (abril a junio), Thyssenkrupp ha ganado 76 millones, un 49% menos que hace un año; aunque mejoró el Ebitda, ascendiendo a 584 millones, y el Ebit ajustado, que se situó en 721 millones por la subida de los precios de venta del acero, que compensaron los mayores costes de la energía y las materias primas. Además, las ventas han crecido un 26%, a 10.950 millones; y los pedidos, un 13%, a 9.946 millones.
Reducirá 12.000 empleos para el año fiscal 2023/2024 y ya ha encontrado soluciones para unos 9.500 (incluidos 1.700 en los nueve primeros meses de su presente ejercicio, donde ha bajado su plantilla en 4.440 personas, hasta 97.152)
Klaus Keysberg, director financiero de Thyssenkrupp, ha señalado que “en el tercer trimestre, nuevamente nos vimos afectados por el aumento del precio de las materias primas y otros materiales. Sin embargo, esperamos una relajación considerable del capital circulante neto y un flujo de caja claramente positivo en el cuarto trimestre”. “Regresar a un flujo de caja libre positivo sostenido antes de las fusiones y adquisiciones, en una perspectiva de todo el año, sigue siendo nuestro objetivo prioritario. Estamos seguros de que lo lograremos mediante la realización sistemática de nuestra transformación y la mejora estructural continua de nuestros negocios”, ha añadido. Ojalá cierre el ejercicio con mejor resultado que en el anterior, en el que perdió 115 millones.
El grupo industrial prosigue con su reestructuración y reducción de costes, así como su ajuste laboral: reducirá 12.000 empleos para el año fiscal 2023/2024 y ya ha encontrado soluciones para unos 9.500 (incluidos 1.700 en los nueve primeros meses de su presente ejercicio, donde ha bajado su plantilla en 4.440 personas, hasta 97.152). Thyssenkrupp cuenta con negocio siderúrgico, pero también fabrica submarinos, piezas de automóviles (donde está notando especialmente los problemas en las cadenas de suministros), plantas de fertilizantes y electrolizadores; y recuerden que vendió su joya de la corona, su división de ascensores (hoy llamada TK Elevator y de la que conserva una participación minoritaria integrada en su división Multi Tracks), a un consorcio de fondos liderado por Advent, Cinven y RAG Foundation en febrero de 2020.