Bruselas ha puesto unas condiciones a Orange-MásMóvil que benefician a Orange-MásMóvil... y a Digi, y perjudican a Telefónica, que nada tiene que ver con la fusión
Lo que ha sucedido con la fusión Orange-MásMóvil no había sucedido nunca antes en Europa y resulta de lo más llamativo. Y es que los 'remedies' impuestos por Bruselas, las condiciones para la fusión, no sólo no perjudican a los fusionados con el fin de compensar la balanza en aras de la competitividad, sino que les benefician directamente a ellos y a un tercero, Digi, señalado directamente desde la Comisión Europea como beneficiario. Inaudito e inexplicable.
Dicho de otra manera, Bruselas presenta como ‘remedie’ el espectro que sobrepasa el máximo autorizado por la normativa española, esto es, un espectro que tanto Orange como MásMóvil ya sabían que tenían que ceder porque así lo marca la normativa española.
¿Qué ha sucedido? Que en lugar de cederlo al Estado para su posterior subasta para que pudieran pujar todos los operadores, Bruselas le adjudica a Digi la posibilidad de acceder en exclusiva a ese espectro sin necesidad de pujar con nadie más y, por tanto, a un precio más que competitivo. No sólo eso, sino que el dinero no revertirá en el Estado -sería lo más lógico-, sino en la fusionada Orange-MásMóvil.
Luego está lo del acuerdo de roaming nacional o contrato mayorista, más sorprendente, si cabe, que lo anterior. Y lo es por dos motivos: porque supone una injerencia directa de Bruselas, y sin venir a cuento, en el contrato privado de dos compañías privadas y, en segundo lugar, porque no supone un ‘remedie’ para la fusionada Orange-MásMóvil, sino a un tercero, Telefónica, que nada tiene que ver con la fusión. ¡Ah! y de nuevo, la más beneficiada es Digi, por designio directo de Bruselas.
Digi utiliza actualmente la red móvil de Movistar, un contrato mayorista con vigencia hasta septiembre de 2026. Pues bien, en virtud de las condiciones aplicadas a la fusión, la Comisión Europea le ha otorgado al grupo rumano la capacidad de contratar ese mismo servicio con Orange-MásMóvil -la fusionada está encantada, se pueden imaginar- lo que le permite a Digi negociar su próximo contrato mayorista desde una posición mucho más ventajosa, sabiendo que tiene disponible la carta Orange-MásMóvil.
Y ojo, porque además de Movistar, en el mercado mayorista también está la nueva Vodafone, bajo la tutela del fondo Zegona, que ya ha advertido que competirá con todas sus fuerzas en ese mercado mayorista.
En definitiva, algún día Bruselas tendrá que explicar por qué en la fusión Orange-MásMóvil ha dictaminado unas condiciones que no sólo no compensan la balanza del mercado para favorecer la competencia, sino que benefician a la fusionada, que pasará a ser la incumbente por número de clientes… y a Digi.