Decíamos ayer, que José María Aznar estaba vendiendo Vocento a alguna extrajera. O al menos, vendiendo ABC. 

Pues bien, antes de la presentación de resultados del grupo, correspondientes al ejercicio 2024 (Ver documento adjunto), las acciones del entramado periodístico vasco caían un 2,73%. No, los presagios no eran buenos y no se equivocaron: los resultados de Vocento en 2024 no son malos, son muy malos.

La cifra de ingresos ha descendido hasta los 344,7 millones de euros, lo que supone un 4,9% menos que en 2023. Aunque la facturación por publicidad se ha mantenido relativamente estable, el retroceso en otros ingresos de explotación ha impedido sostener la actividad. 

El EBITDA reportado ha sido negativo en 8,9 millones de euros, y ni siquiera el indicador ajustado (excluyendo indemnizaciones) permite una lectura optimista: 11 millones de euros, frente a los 39,7 millones del ejercicio anterior.

El hundimiento del resultado neto se explica principalmente por tres factores: 

1.El deterioro de activos por valor de 61 millones de euros.

2.El impacto negativo del cierre del deportivo digital Relevo, que ha generado unas pérdidas operativas de 4,9 millones y ha activado un proceso de

ERE y (iii) una estructura de costes demasiado rígida en un contexto de ingresos decrecientes.

La aventura de Relevo -lanzada en 2022 como una gran apuesta generacional- ha acabado en fracaso estrepitoso, sin rentabilidad, sin ingresos recurrentes y con un coste reputacional nada menor

En el plano financiero, Vocento ha sufrido un notable deterioro. La deuda financiera neta ha pasado de 15,1 millones de euros en 2023 a 43,1 millones en 2024 (excluyendo arrendamientos), más que duplicándose en un solo ejercicio. Si se incluye el efecto de la NIIF

El 16 de diciembre, la deuda neta asciende ya a 59,3 millones de euros. Al mismo tiempo, el patrimonio neto consolidado se ha desplomado un 39 %, hasta los 161,6 millones, como reflejo directo de las pérdidas y de una política de dividendos que sigue sin justificarse. A pesar de este panorama, el conglomerado empresarial sigue generando EBITDA positivo en su negocio de prensa regional, que representa el núcleo de su actividad, y mantiene posiciones relevantes en áreas como clasificación digital. Sin embargo, la aventura de Relevo -lanzada en 2022 como una gran apuesta generacional- ha acabado en fracaso estrepitoso, sin rentabilidad, sin ingresos recurrentes y con un coste reputacional nada menor. El grupo lo ha finiquitado en apenas dos años, reconociendo un error estratégico que se suma a otros intentos fallidos de diversificación en el pasado.

Como conclusión, Vocento ha destruido en 2024 prácticamente toda la mejora financiera acumulada durante los últimos ejercicios. Con un resultado neto profundamente negativo, una deuda que se dispara y una rentabilidad operativa bajo mínimos: el Grupo se enfrenta ahora al reto de redefinir su estrategia sin margen para nuevos experimentos. El cierre de Relevo simboliza, no sólo el fracaso de una apuesta concreta, sino también los límites de un modelo que ha perdido capacidad de adaptación y, por ahora, no ofrece alternativa viable, al menos sin una inyección de capital.